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Italia recurrirá la condena de los crucifijos y el Vaticano acusa de "miopía" a Estrasburgo

  • La sentencia condena la exhibición de crucifijos en las aulas italianas
  • Los políticos italianos defienden de forma unánime la tradición católica del país
  • Si no se atiende la solicitud italiana, la sentencia será definitiva en tres meses
  • El Vaticano habla de "error" y "miopía" refiriéndose a la condena

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Italia recurrirá la sentencia de la Corte de Estrasburgo que considera que colocar un crucifijo en las clases constituye una violación   del derecho de los padres   para educar a los hijos. Si no se atiende la solicitud   italiana, la sentencia se convertirá en definitiva dentro de tres meses.

La clase política italiana se ha puesto de acuerdo, casi de manera unánime, para defender la tradición católica del país.   La   ministra de Educación asegura que   el crucifijo no   significa una adhesión al catolicismo, sino que es más bien una tradición.

El propio líder de la oposición Pier Luigi Bersani lo califica también de tradición inofensiva. Más cauto ha estado el presidente de la Cámara, Gianfranco Fini, que quiere ver las motivaciones de la sentencia antes de realizar comentario alguno.

Alessandra Mussolini cree, sin embargo que llegado a este punto, es necesario y urgente  introducir  en la constitución italiana las raíces cristianas del país.

Tan sólo los políticos de la izquierda, como el secretario de Refundación Comunista, Paolo Ferrero, aplaude la sentencia, señalando que un estado laico  debe respetar todas las religiones pero no identificarse con ninguna.

El jurista católico y presidente del Tribunal del Vaticano, Giuseppe Dalla Torre,  considera que el crucifijo en las aulas es un símbolo religioso pasivo que no viola la libertad de religión de los alumnos.

En declaraciones a la agencia italiana ANSA, Dalla Torre considera poco fundadas las motivaciones de la Corte de Estrasburgo y lo basa en dos razones: que el crucifijo no impone un acto de fe, y que no sólo representa a la cultura católica, sino a la más amplia cultura cristiana europea conllevando un mensaje de caridad, comprensión y respeto al semejante.

Críticas del Vaticano

El Vaticano ha hablado a última hora de esta tarde para decier que la sentencia de Estrasburgo es una decisión miope y equivocada

A juicio del portavoz del Vaticano, padre Federico Lombardi, esta sentencia del alto tribunal europeo desilusiona a todos los católicos del viejo continente. 

"La decisión  del Tribunal de Justicia Europeo (Estrasburgo), ha sido recibida en el Vaticano  con asombro y pesar", ha declarado Lombardi.

"El  crucifijo ha sido siempre un signo del amor de Dios, de la unidad y la hospitalidad de  toda la humanidad. Es desagradable que se considere un signo de división,  exclusión o restricción de la libertad ", ha agregado.

Para él, "es erróneo y miope el  querer excluir de la realidad educativa un signo fundamental de la  importancia de los valores religiosos en la historia y la cultura italiana".

"Es sorprendente que el Tribunal Europeo intervenga con tanta contundencia en un campo muy estrechamente vinculado a la identidad histórica, cultural (y  espiritual) del pueblo italiano", ha asegurado el padre Lombardi, diciendo que "parece  que se quiera negar el papel del cristianismo en la formación de la identidad  europea, que, sin embargo, ha sido y sigue siendo esencial".

El Papa  Benedicto XVI insiste regularmente sobre las raíces cristianas de Europa y lo volvió a recordar en su viaje a Praga en septiembre.