Los fondos desviados por Millet del Palau de la Música podrían superar los 31 millones de euros
- Una auditoría cifra los fondos desviados entre 25 y 31,2 millones de euros
- Se desviaron 2,76 millones desde el Consorcio del Palau, según el informe
- También se destinaron 2,5 millones para obras en domicilios de Millet y Montull
El agujero económico en el Palau de la Música Catalana podría alcanzar los 31 millones de euros, según la auditoría encargada por los nuevos gestores de la entidad y elaborada por Deloitte.
Según el informe, el ex presidente del Palau, Félix Millet, y el ex director financiero, Jordi Montull, habrían desviado entre 25 y 31,2 millones de euros durante los últimos diez años.
El informe contable recoge, además, que hubo desviaciones de 2,76 millones de euros desde el propio Consorcio del Palau, el órgano integrado por las administraciones públicas que le otorgan subvenciones, según la información que publica este jueves La Vanguardia.
También se especifica en la auditoría que entre 2005 y 2009 el equipo directivo de Félix Millet cobró 8 millones en bonus y que se destinaron 2,5 millones para obras en los domicilios de Millet y Montull.
Además, el informe valora en 12,8 millones de euros el dinero retirado en efectivo, de los cuales 10,1 eran de la Fundación del Palau y 2,7 del Orfeò Catalá.
Mientras, el Periódico de Catalunya cifra en 25 millones de euros el agujero económico. Según el diario catalán, la ex directora general del Palau, Rosa Garicano, dio el visto bueno para que la Fundación Orfeò-Palau abonara los gastos de las dos bodas de las hijas de Fèlix Millet.
También destaca en su información que parte de los fondos desviados, algo más de 90.000 euros, se destinaron a compensar al Ayuntamiento de l'Ametlla del Vallès por la recalificación en 2003 de unos terrenos de Millet en este municipio.
En concreto, el dinero se utilizó para la compra de muebles, estanterías y ordenadores para la biblioteca pública de la localidad.
El informe se dará a conocer a las administraciones que forman parte del Consorcio del Palau y a los órganos de gobierno de la entidad musical antes de ser remitido al Juzgado barcelonés que instruye el caso.