The Mary Onettes se visten de británicos ochenteros en 'Islands'

• El segundo álbum de los suecos les pone a la cabeza del indie en su país
• Es un cóctel con la voz del Ekström, baterías, bajos, sintetizadores y cuerdas
• Editado por Labrador, está desde el 4 de noviembre en España

El olfativo sello sueco Labrador se viste de gala para lanzar el segundo álbum de su grupo estrella, The Mary Onettes. Con sonidos que nos remiten a los oscuros años ochenta de The Cure, New Order o The Jesus And Mary Chain, las 'Mari Onetas' se permiten derrochar madurez musical en Islands.

En su segundo largo, el cuarteto sueco va a lo seguro: un sonido dominado por la voz de Philip Ekström, alma y líder del grupo, arropada por baterías y bajos que van de la mano de sintetizadores y cuerdas, majestuosamente grabadas éstas en una iglesia.

Y así, sin arriesgar, la banda consigue que los diez temas que componen Islands entren con suavidad por los oídos de cualquiera dispuesto a dejarse seducir por una dosis de pop rock amable, que seguramente encuentra su mejor momento en "God Knows I Had Plans".

La historia comienza con una sublime "Puzzles" y termina con "Bricks", la canción que más crece para volver a hacerse pequeña en el álbum. Entre una y otra, aparecen grandes piezas, como la colorida "Dare" o "The Disappearance of My Youth", que, de no ser de factoría sueca, bien podría haber cabido en el "Viva la Vida" de Coldplay.

Con este disco, The Mary Onettes se ponen de nuevo a la cabeza de los grupos indies made in Sweden, con la particularidad de cultivar un sonido que viaja por nebulosas de arreglos grandiosos y fatalistas.

Islands es un album editado por Labrador y está disponible desde el 4 de noviembre en España, donde Everlasting Records se encarga de su distribución.