Los cinco acusados del 11-S serán juzgados por un tribunal civil de Nueva York
- Obama decide que una corte federal se encargue de juzgarlos
- Esta opción refuerza su decisión de cerrar Guantánamo
- Entre los sospechosos juzgados está el 'cerebro' del ataque terrorista
- Aún se desconoce si la Fiscalía pedirá para ellos la pena de muerte
- Las técnicas de interrogatorio usadas pueden dificultar la condena
Los cinco hombres acusados de participar en los atentados del 11-S, incluido el autoproclamado cerebro de los mismos, Khalid Sheikh Mohammed (conocido como KSM), serán juzgados por una corte federal civil a unos pocos metros de las Torres Gemelas cuya destrucción idearon y no en Guantánamo.
La decisión, que será anunciada por el fiscal general, Eric Holder, supone un paso firme del nuevo gobierno estadounidense para cerrar la prisión de la polémica prisión, precisamente el día en el que el asesor nombrado por el presidente de EE.UU. para hacerse cargo de este proceso de cierre ha presentado su dimisión.
Holder tenía hasta el lunes para decidir qué hacer con diez detenidos que debían afrontar un juicio ante las polémicos comisiones militares, que Obama ha prometido dejar de lado en favor de los tribunales civiles.
Con todo, habrá algún detenido que será juzgado por estos tribunales militares, como el presunto responsable del ataque terrorista al barco de guerra USS en el años 2000.
En el sistema militar, los cinco sospechosos de los ataques del 11-S se enfrentaban a la pena capital, pero el Departamento de Justicia no ha dicho si pedirá la pena de muerte para estos hombres una vez que pasen a estar bajo la custodia de la Justicia civil.
Dificultades legales
Sin embargo, traer a este destacado sospechoso a Estados Unidos para responder ante un tribunal federal puede traer complicados problemas legales, sobre todo en lo referente a la aplicación de los programas antiterroristas a estos presos, que incluían técnicas de interrogatorio que se consideran tortura, como el ahogamiento simulado. Mohammed sufrió 183 veces estos ahogamientos en 2003, antes de que la práctica fuese prohibida.
Arrestado entre 2002 y 2003, KSM y los otros cuatro hombres acusados por los atentados del 11-S que serán juzgados con él -Ramzi ben al-Shaiba, Ali Abd al-Aziz Ali, Wallid ben Attash y Mustapha al-Hawsawi- estaban desaparecidos desde entonces hasta 2006, cuando reaparecieron en Guantánamo. Se considera que durante ese periodo de tiempo fueron torturados en cárceles secretas de la CIA.
A su favor Holder tiene que los fiscales que se harán cargo del caso, en el Distrito Sur de Nueva York, tienen una probada experiencia en casos terrorismo en la corte del bajo Manhattan, a solo unos metros del lugar donde estaba el World Trade Center, que cayeron por el ataque ideado por Mohammed, en el que murieron 3.000 personas.
Además, un jurado popular de Nueva York difícilmente se vería emocionado por estas torturas conociendo la magnitud de los atentados tan directamente.