Barack Obama llega a Pekín, tras abogar en Shangai por la libertad de expresión
- Ha defendido la libertad de expresión e información
- Ha criticado la censura de contenidos en internet
- Obama y Jintao desactivan la cumbre de Copenhague
- Han acordado no firmar compromisos concretos
El presidente de EEUU, Barack Obama, ha llegado a Pekín en la tercera etapa de su gira asiática procedente de Shanghái, donde en su reunión con jóvenes chinos ha abogado por la libertad de expresión, de culto y de información, e incluso en internet.
En un encuentro con jóvenes universitarios en el Museo de Ciencia y Tecnología en la capital financiera china, Obama ha asegurado que no buscan "imponer esos valores", pero tampoco creen "que son sólo de un país. Son derechos universales".
Ha defendido la libertad de información y de prensa y ha asegurado que es "un gran defensor" de la abolición de la censura y de la "apertura" del acceso de información en internet.
"Pensamos que las libertades de expresión y de culto y el acceso a la información son derechos universales", ha asegurado Obama.
"Deberían ser accesibles a todos, incluyendo las minorías étnicas y religiosas, ya sea en Estados Unidos, en China, o en cualquier parte", ha agregado.
Este llamado del presidente de Barack Obama a que haya libertad de internet en China se ha encontrado, sin embargo, con el recelo y el pesimismo de muchos usuarios chinos de la web, lo que podría indicar que su intento por ganarse a la juventud aún tiene un camino por recorrer.
Algunos fueron intensamente patrióticos en sus comentarios, citando el estatus de China como el mayor acreedor del Gobierno de Estados Unidos como una razón para la educada apertura de Obama, en una especie de mitin con estudiantes de Shanghái.
"El objetivo de la visita de Obama a China es conseguir que China ayude a la salud económica de Estados Unidos. Es como una zorra en un gallinero", afirmó el internauta Xin DeGuiHui.
China ha cortado el acceso a las populares redes sociales Facebook desde marzo y Twitter desde julio, con la excusa de la necesidad de armonía social.
La región fronteriza de Xinjian no tiene acceso a páginas web del exterior desde los disturbios étnicos de julio.
Portales chinos como NetEase.com y Sina ayudan a llenar el vacío, con clones de Facebook y Twitter y foros que dan actividad a cerca de 350 millones de internautas chinos, que sobrepasan la población de Estados Unidos.
El presidente estadounidense ha asegurado en una breve intervención que los dos países no deben ser rivales, sino cooperar para resolver problemas globales como la no proliferación nuclear o el cambio climático.
"A menos que China y EEUU estén de acuerdo, se podrán resolver muy pocos problemas internacionales", ha declarado Obama.
Como en su discurso del pasado sábado en Tokio, en el que repasó las relaciones de su país con Extremo Oriente, el presidente estadounidense ha subrayado que EEUU no quiere "contener" la pujanza de China y que, por el contrario, da la bienvenida a una República Popular "fuerte y próspera".
"China y EEUU no deben ser rivales", ha sostenido el presidente estadounidense, que ha subrayado que la colaboración entre los dos países contribuirá a lograr "la paz y la prosperidad en el mundo".
El presidente estadounidense fue preguntado, entre otros asuntos, por las relaciones entre Taiwán y la República Popular, sobre lo que Obama ha asegurado "no quiero cambiar la política estadounidense" antes de expresar su complacencia por la reducción de las tensiones y la "mejora de las relaciones a ambos lados del estrecho".
EE.UU. y China arruinan la Cumbre de Copenhague
Estados Unidos y China, los países más contaminantes del mundo, han acordado que no firmarán compromisos concretos en la cumbre de Copenhague sobre Cambio Climático que comenzará el próximo 7 de diciembre.
Este anuncio supone el fracaso de la conferencia del clima en la que se pretendían sentar las bases de un acuerdo global y vinculante que permitiera reducir las emisiones de dióxido de carbono.
A la decisión de Obama y Hu Jintao se han sumado algunas de las principales naciones emergentes del mundo, que tampoco suscribirán ningún compromiso.
El viaje a China de Obama es considerado como el punto culminante de su gira asiática de una semana que lo llevó a Tokio, Singapur (APEC), Shanghai y Pekín, y que terminará en Seúl.