Mainar insiste en que se "autoinculpó" del crimen de Fago para que "dejaran de presionar" al pueblo
- El imputado dice que el alcalde tenía "una cara tiránica" con quien discrepaba
- Dice que hubo un "acuerdo tácito" con la Guardia Civil para asumir el asesinato
- Mainar dice que fue "creando una ficción teatral" con los detalles que le contaron
- El fiscal pide 21 años de cárcel para Mainar por el asesinato de Grima
- Explica la presencia de su ADN en el coche de Grima, porque tuvo que moverlo
- Todos los datos sobre crimen de Fago, en un especial de TVE Aragón
El único imputado por el asesinato del alcalde de Fago se ha ratificado en su inocencia y ha respondido que "quiso autoinculparse para llamar la atención" y provocar su detención.
El ganadero y guardia forestal Santiago Mainar asegura que llegó a un "pacto tácito" con la Guardia Civil para asumir los hechos para "que dejaran de presionar" a los vecinos del pueblo por la muerte de Miguel Grima.
El fiscal, que pide 21 años de cárcel por asesinato y tenencia ilícita de armas, ha recordado a Mainar que no habló de ningún pacto en su declaración judicial y le ha recordado que dijo que no le presionaron en ningún momento.
"En esos momentos, después de dos horas en un calabozo sin luz, sin comida, con un agua seguramente con barbitúricos. La lucidez mental no es la que debería en esos momentos".
El acusado ha respondido durante más de dos horas al fiscal Felipe Zazurca, a los abogados de la acusación, Enrique Trebolle y Jose María Viladés, y a su abogado defensor, Marcos García-Montes.
El juicio se reanudará este martes con el testimonio de un médico que encontró en la carretera el coche de Grima y a un hombre, que no ha identificado como Mainar.
Al ser preguntado por el fiscal Felipe Zazurca si respondería a su cuestionario, Mainar ha dicho que sí y ha ratificado su inocencia, como hizo en la declaración que realizó ante el juez de Jaca que investigó el caso, retractándose de su autoinculpación inicial ante la Guardia.
Mainar afirma que "fue creando una ficción teatral" intentando adaptar su declaración a la realidad a partir de un "guión mental" para "forzar su detención" con los detalles que le fueron contando durante tres semanas "periodistas, escritores y curiosos".
El guardia forestal ha insistido en que su objetivo era "llamar la atención para que le llevaran a él en lugar de otra persona. Eso se llama altruismo", ha declarado Mainar.
El único imputado ha sugerido que fue la propia Guardia Civil con sus preguntas la que le ofreció datos sobre el crimen, como el tamaño del vehículo del médico navarro con quien se cruzó el asesino, en la noche del 12 de enero de 2007, informa Europa Press.
Mainar ha apelado al "sentido común" para negar que conociera datos del crimen que sólo puede conocer el verdadero autor y ha dicho que es aficionado a las "novelas policiacas".
Lo único que hizo, según ha añadido más adelante, es "pedir a la policía que le ayudaran a hacer una declaración más coherente" y que para ello "intercambiaron información".
Restos de disparos en las manos
Preguntado por el abogado de la familia de Grima, Enrique Trebolle, sobre los restos de plomo, antimonio y bario que se encontraron en sus manos, Mainar ha negado que él disparara un arma y ha explicado su presencia por los casquillos que el suele recoger cerca de su casa o porque pudo dar la mano a algún cazador.
Sobre los restos de ADN que se encontraron en el vehículo de Grima, Mainar ha dicho que se vio obligado en varias ocasiones, incluso el mismo del asesinato, a retirar el coche del entonces alcalde "porque estaba en su garaje".
"La cara terrorífica de Grima"
Santiago Mainar ha reconocido que estaba "indignado", como muchas personas del pueblo, con el señor Grima, pero no enfadado. El único imputado asegura que el alcalde tenía una "cara terrorífica", "tiránica", con las personas que "se oponían a sus fechorías y barbaridades".
Según Mainar, Grima tenía un "carácter envenenado por falta de empatía" y que, en su opinión, "tenía algún tipo de trastorno aunque no es especialista".
No obstante, el acusado ha negado que resuelva sus problemas a tiros y ha subrayado que su manera de resolverlo es "con diálogo y palabra".
Ante el tribunal, Mainar ha declarado: "no he matado a nadie", en respuesta a una pregunta del abogado José María Viladés, que representa al Partido Popular, por el que concurrió a las elecciones el alcalde asesinado, y que ejerce la acusación popular, informa Efe.
Su abogado intenta demostrar su inocencia
El abogado de Mainar, Marcos García-Montes, ha intentado demostrar la inocencia de su cliente, detallando las conversaciones telefónicas que mantuvo el imputado con sus familiares sobre detalles del crimen que se conocían por los medios de comunicación antes de que él se "autoinculpara".
García-Montes ha basado también su defensa en las cataratas que tiene Mainar, lo que le habría impedido disparar, y a la bronquitis que sufría esos días, lo que le impedía haber salido esa noche del asesinato porque estaba nevando.
El letrado también ha hecho referencia al testimonio de un médico guipuzcóano y su mujer que vieron a "dos o tres desconocidos" junto al coche de Grima esa noche.
Mainar llega tranquilo
Santiago Mainar ha llegado tranquilo al juzgado pero no ha hecho declaraciones. Ha sido trasladado a la capital oscense en un furgón de la Guardia Civil procedente de la cárcel de Zuera (Zaragoza), donde permanece ingresado desde que fuera detenido por su supuesta implicación en el asesinato.
El único que ha hablado ha sido su abogado que explicó a los periodistas que presentaría pruebas para demostrar la inocencia de su defendido a quién ha calificado de hombre "ilustrado". El crimen, ha añadido, es propio de la "España profunda de Puerto Hurraco", informa Europa Press.
A las puertas de la sede judicial se congregaron desde primera hora de la mañana, numerosos periodistas y curiosos atraídos por la gran repercusión que este caso ha tenido en los medios de comunicación.
Además del guarda forestal, en las ocho jornadas que se prevé dure el juicio declararán 122 personas, entre ellas peritos, guardias civiles y testigos, algunos de ellos vecinos de Fago, informa Efe.
Para cubrir esta información se han acreditado casi 200 periodistas de más de 30 medios de comunicación del país, por lo que el Tribunal Superior de Justicia de Aragón ha tenido que acondicionar un pabellón anejo a la Audiencia Provincial desde donde los profesionales podrán seguir el juicio.