Herman Van Rompuy, el hombre del consenso
- Van Rompuy es el primer ministro de Bélgica
- Llegó a su cargo tras la forzada dimisión de su antecesor
- Pertenece al partido CD&V de Flandes y es economista de profesión
- Se ha ganado el reconocimiento por su carácter conciliador
- Surgió como favorito por sorpresa, aunque tuvo el apoyo de Francia y Alemania
Herman Van Rompuy, actual primer ministro de Bélgica, de 62 años, llegó casi sin querer a su cargo tras la forzada dimisión de su antecesor.
Perteneciente al partido cristianodemócrata, CD&V, de Flandes y economista de profesión, ha sido además presidente de la Cámara de Representantes de Bélgica desde el 12 de julio de 2007 hasta el 30 de diciembre de 2008.
Van Rompuy se ha ganado el reconocimiento a nivel doméstico y europeo por su carácter conciliador y hábil forjador de consensos. Su edad, aspecto de sacerdote aburrido, filiación democristiana y afición por la filosofía religiosa engañan: es autor de haikus (poemas japoneses cortos), tiene un perfil en Facebook y posee un agudo sentido del humor.
Bélgica se resistía a perder al hombre que ha sabido conciliar las opiniones más adversas de la comunidad francófona y de la flamenca, en el año escaso que lleva al frente del gobierno.
Ese talante de mediador es el que ponen de relieve los países que le han apoyado, con Francia y Alemania al frente. También pesa a su favor el hecho de que proceda de un país pequeño, fundador de la Unión.
El apoyo del eje franco-alemán a HVB, como se le conoce en su país, dejó mudo a Londres.
Van Rompuy surgió como un favorito de sorpresa tras las celebradas candidaturas del ex primer ministro británico Tony Blair y sus homólogos de los Países Bajos y Luxemburgo, Jan Peter Balkenende y Jean Claude Juncker. Blair, originalmente considerado el favorito, fue descartado tras la ferrea oposición de los Estados del Benelux.