Los diputados del Partido Nacional respaldan el derrocamiento de Zelaya
- Respaldan el decreto 141/2009 del 28 de junio con el que se destituyó a Zelaya
- El Partido Nacional tiene 55 escaños en el Congreso, necesarios para restituirle
- Zelaya ha rechazado ser restituido para no legalizar las elecciones
La bancada del Partido Nacional ha anunciado en la sesión del Congreso que debate la restitución de Manuel Zelaya su respaldo a la ratificación del decreto del 28 de junio con el que se destituyó al presidente tras un golpe de Estado.
"Nos manifestamos a favor de la ratificación del decreto 141/2009 aprobado del 28 de junio", ha afirmado en el pleno del Congreso Rodolfo Irías, jefe de bancada nacionalista, que tiene 55 escaños en el Congreso y cuyos votos eran necesarios para restituir a Zelaya.
"Esta posición es unánime, alejada de todo oportunismo", ha agregado Irías, el líder de la bancada del partido de Porfirio Lobo, presidente electo tras vencer en los comicios generales del pasado domingo y rechazados por la mayor parte de la comunidad internacional por considerar que se produjeron en un marco de ruptura del orden constitucional.
En los días previos se había manejado como posibilidad para que el presidente depuesto fuera restituido que los 55 votos nacionalistas se sumaran a los de una veintena de los 62 diputados del Partido Liberal -el mismo de Zelaya y del presidente de facto, Roberto Micheletti-, y a los cinco del izquierdista Unificación Democrática.
Irías había defendido que al Congreso Nacional "sólo le correspondió tomar una decisión, seguramente difícil y desagradable, pero necesaria e inevitable para salvar el modelo democrático", el 28 de junio.
Zelaya rechaza ser restituido "para no legalizar las elecciones"
El jefe del Partido Nacional ha señalado en la motivación de la decisión del Partido Nacional que Zelaya "ha manifestado públicamente su rechazo total al acuerdo Guaymuras-Tegucigalpa-San Jose" y "ha brindado declaraciones claras y contundentes en contra de las elecciones más limpias, transparentes y concurridas" en Honduras.
En ese acuerdo, firmado por Zelaya y el presidente de facto, Roberto Micheletti, el pasado 30 de octubre, se contemplaba que el Congreso fuera el órgano que decidiera sobre la restitución del presidente derrocado, entre otros puntos.
Además, Irías ha indicado que el presidente depuesto "ha declarado que no está dispuesto a regresar a ocupar la titularidad del poder Ejecutivo".
Zelaya ha afirmado en los últimos días que no permitiría ser restituido para "legalizar el golpe de Estado" y "blanquear el fraude electoral" del pasado domingo, en el que, según él y sus seguidores, la abstención superó el 60%.
El diputado del Partido Nacional ha rechazado tomar "una posición de cálculo y oportunismo en procura del aplauso de un sector político interno y de un bloque de naciones agrupadas por intereses que no necesariamente son los de Honduras".
"Nuestros votos no deben servir para agudizar una crisis que tiende a ser sustituida por la estabilidad ni servir a una maniobra populista", ha agregado, al insistir en que esa postura es "clara y contundente ante la comunidad internacional".