Vía libre para reanudar el proceso electoral en Caja Madrid tras el acuerdo de las partes

• La jueza Inmaculada Vacas puede levantar la suspensión en cinco días
• Todas las partes están de acuerdo en que se reanude el proceso

La vista oral llevada a cabo en el Juzgado número 60 de Madrid muestra que todas las partes representadas en este proceso quieren que el proceso electoral en Caja Madrid se reanude y que se levante la medida cautelar de suspensión decidida por la jueza Inmaculada Vacas el pasado 2 de octubre.

La unión sindical de CC.OO. de Madrid y su candidatura de impositores no se opusieron durante la vista pública a la petición de Caja Madrid, el Ayuntamiento de Madrid y la Cámara de Comercio, dando vía libre así a que la jueza pueda, en un plazo de unos cinco días, revocar el auto en el que dejó congelado el  proceso de elección de cargos.

Tras el acuerdo en el seno del PP para que Rodrigo Rato presida la entidad y el Ayuntamiento haya presentado el desistimiento de sus derechos en el caso -aunque la jueza no ha admitido aún el mismo-,  la vista tenía por fin escuchar a las partes sobre la oportunidad de continuar o no con el proceso electoral.

Los dos abogados de CC.OO., uno por la candidatura de impositores y otro por la unión sindical como entidad representativa, subrayan que no renuncian al fondo del procedimiento respecto a la inconstitucionalidad de la Ley de Cajas autonómica.

Reparto desigual

Comisiones Obreras mantiene que si la entidad fundadora renuncia a nombrar a sus representantes en la asamblea general, se repartirán de manera proporcional entre todos los sectores que la forman.

La vista se inició con una cuestión previa de procedimiento por la cual Caja Madrid solicitaba que no se dejara intervenir a los representantes del sindicato, por no haberse señalado como parte demandante ni haber solicitado en su recurso la suspensión del proceso electoral.

Esta cuestión fue rechazada por la jueza y el abogado del sindicato se muestra sorprendido por la "beligerancia" de sus colegas contra su posición, pero  mantuvo que el reparto de los consejeros de la Casa Real supone una "alteración" del número de consejeros.