Bono abronca a los diputados por su falta de "respeto" con los oradores
- Amenaza con obligarles a votar en cada punto del orden del día
- Ahora se acumulanlas votaciones y se vota al final
- El presidente dice que los diputados "no paran de hablar"
El presidente del Congreso, José Bono, ha "amenazado" a los diputados con obligarles a votar varias veces en un mismo pleno, y no de una sola tanda como ocurre ahora, para tratar de acabar con la "falta de respeto" hacia los oradores que demuestran al no parar de hablar hasta que llegan las votaciones.
Visiblemente enfadado, Bono ha hecho esta advertencia al término de la sesión plenaria, justamente antes de afrontar las votaciones de la mañana y después de hacer notar las dificultades que para escuchar a los oradores había ocasionado el ruido de los diputados.
José Bono ha pedido excusas al último en intervenir, el diputado del PSOE Javier Moscoso, y a sus predecesores, en nombre de quienes sí tenían interés en escuchar "porque es difícil encontrar un grupo humano que falte tan gravemente al respeto de quien está en la tribuna", ha remarcado.
Algunos diputados han aplaudido a Bono
Sus palabras han provocado murmullos en las bancadas e incluso algún aplauso, mientras el presidente ha continuado su reflexión.
“Se falta el respeto gravemente a quien está en la tribuna“
"Si hemos de seguir de este modo, la Mesa y la Presidencia considerarán que las votaciones se produzcan inmediatamente después de la discusión de los asuntos, para mejorar la imagen en lo que a respeto y atención se refiere", ha concluido.
Bono ha recibido aplausos desde los escaños de los diputados que sí se han sentido molestos con el constante alboroto que a lo largo de la mañana se ha escuchado en el hemiciclo.
Desde que es presidente del Congreso, en esta legislatura, las votaciones de los asuntos debatidos en cada sesión se acumulan a su término, al margen de que sean muchos o pocos los puntos fijados en el orden del día.
Ello permite a los diputados calcular cuándo tienen que estar obligatoriamente en el escaño para pulsar los botones de votación.
Si se modificara el sistema, como ha sugerido José Bono, los parlamentarios deberían estar forzosamente presentes en el hemiciclo tantas veces como puntos hubiera que tratar para poder votarlos, uno por uno, según fueran terminando los debates.