La colección de Tita Cervera y la del Museo Thyssen se expondrán juntas a partir de febrero

• En la actualidad se exponen en el museo por separado, desde 2004
• La Thyssen pertenece al Estado y ambas suman un millar de obras

'Retrato de Marguerite dormida', de la exposición del Thyssen sobre Magritte.

A partir de febrero de 2010, los 300 cuadros de la colección privada de Carmen Cervera, baronesa de Thyssen-Bornemisza, se exhibirán junto a la colección del barón que se muestra en el Museo que lleva su nombre.

En la actualidad, la pinacoteca madrileña alberga las dos por separado, la adquirida por el Estado español a Hans Heinrich Thyssen-Bornemisza en 1993, y expuesta de forma permanente desde su apertura en 1992; y la de Carmen Thyssen-Bornemisza, en depósito en el museo desde 2004.

Ambos conjuntos reúnen cerca de mil obras de arte que ofrecen un recorrido por la historia de la pintura europea desde el siglo XIII al siglo XX.

Una colección de arte coherente

"Me hace mucha ilusión que se exhiban las dos colecciones unidas y quiero que desde el cielo mi marido lo vea", ha declarado este martes Carmen Cervera, quien cedió su colección privada para su exhibición de forma gratuita durante once años, plazo que finalizará el 12 de febrero de 2011.

Desde que en el año 2004 se inauguraron los nuevos espacios del Thyssen, en los que se exponen las obras cedidas por la baronesa, se iniciaron las negociaciones para una posible compra de la colección por parte de Estado.

"Lo que hace falta en el mundo, son colecciones de arte coherentes. Es una de las cosas que aprendí con mi marido y ver la colección unida me hace mucha ilusión", ha subrayado la baronesa.

En estos momentos las negociaciones entre Cervera y el Estado continúan, pero no para la venta de la colección, sino para un alquiler por 25 años ya que la baronesa ha decidido que la colección siga en su poder y sean sus herederos quienes decidan sobre el futuro de la misma.

Una coleccíón valorada en 600 a 800 millones de euros

En el caso de no llegar a un acuerdo con el Estado para el alquiler de una colección, que fue valorada entre 600 y 800 millones de euros, la baronesa ha señalado a un grupo de periodistas que tiene "ofertas de varios países", aunque ha advertido que "si yo me voy se queda un vacío muy grande en España".

No obstante, ha admitido que sería "flexible" en algunas condiciones y admitió que estaría dispuesta a vender a la Fundación Thyssen algunos cuadros de los maestros del siglo XVI y XVII "porque creo que pertenecen al Museo", ha declarado.

"Les he dicho a mis abogados que hasta que no lleguen a un punto adelante, no me cuenten nada", explicó la baronesa, quien ha recordado que ya ha negociado la compra con una docena de ministros de Cultura.