Los grandes progresos contra malaria no impidieron casi 900.000 muertes en el 2008
- Los casos se redujeron a la mitad en las Américas entre 2000 y el 2008
La financiación para combatir la malaria aumentó en 1.400 millones de dólares
El aumento de la financiación internacional para los programas contra la malaria ha traído considerables progresos en los últimos años.
Aún así este progreso es insuficiente para luchar contra una enfermedad que en 2008 mató a más de 863.000 personas.
Así lo señala el Informe Mundial sobre la Malaria 2009 difundido por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Más financiación y medios
La OMS constata que los compromisos internacionales de financiación para combatir esta enfermedad pasaron de 300 millones de dólares en 2003 a 1.700 millones en 2009, lo que ha supuesto una espectacular multiplicación de las intervenciones y en una disminución tangible del paludismo.
Los mosquiteros tratados con insecticida y las terapias combinadas basadas en la artemisina han sido las principales actuaciones para atacar este mal transmitido por los mosquitos y que amenaza a la mitad de la población mundial en 108 países donde es endémico.
Pero el informe señala que la financiación todavía está lejos de los 5.000 millones de dólares que se requieren anualmente para garantizar una alta cobertura con esos métodos de prevención y tratamiento.
Se calcula que en 2008, el 31% de los hogares africanos poseía al menos un mosquitero tratado con insecticida, un porcentaje notablemente superior al 17% registrado en 2006.
También se estima que en 2008, en comparación con los años anteriores, aumentó la proporción de niños menores de cinco años que utilizaban esos mosquiteros, hasta llegar a un 24%, aunque eso está aún muy lejos de la meta del 80% fijada por la OMS.
En 13 países africanos con una elevada carga de paludismo, el porcentaje de hogares que poseían mosquiteros superó el 50%, señala el informe.
La tercera intervención básica preconizada por la OMS es el rociado de interiores con insecticidas de acción residual (incluido el DDT), y en 2008 declararon haber recurrido a esa técnica 44 países, 19 de ellos africanos.
Reducción del 50% en Latinoámerica
El número de casos de malaria en la región de las Américas se redujo de 1,14 millones en el año 2000 hasta 572.000 en 2008, según el informe de la OMS.
A pesar de ello, la transmisión de esa enfermedad se sigue registrando en 21 países de la región y cerca de tres de cada 10 personas corren un variable nivel de riesgo de contraerla.
El estudio señala que en 12 países de la región los casos de malaria se redujeron en ese periodo en más de un 50% (Argentina, Belice, Bolivia, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Guayana, Honduras, México, Nicaragua, Paraguay y Surinam).
Cuatro países (Argentina, El Salvador, México y Paraguay) se encuentran en la fase de eliminación o pre eliminación de la malaria.
Cinco países (Brasil, Colombia, Cosra Rica, Panamá y Perú) informaron de fluctuaciones en el número de casos de malaria entre 2000 y 2008, lo que la OMS considera que puede asociarse con una reducción de éstos en los últimos años.
Sólo tres países (República Dominicana, Haití y Venezuela) informaron de un incremento de casos en ese periodo, aunque en el caso de Haití se relaciona con el aumento del número de análisis de sangre realizados cada año.