Condenado a 17 años el hombre que mató a esposa y llevó su cadáver a la comisaría

• Deberá indemnizar a los hijos del matriminio con 150.000 euros
• La sentencia añade que el procesado era plenamente consciente

José Vicente M.H., que en enero de 2008 mató a su esposa y trasladó su cadáver a la Jefatura Superior de Policía de Murcia, donde se entregó, ha sido condenado a 17 años de cárcel por un delito de asesinato. 

Además, el acusado, que fue juzgado por un jurado popular que lo consideró culpable, deberá indemnizar a los tres hijos del matrimonio con 150.000 euros.

La sentencia de la Audiencia Provincial de Murcia afirma que el acusado apuñaló a su esposa, que no había querido atender su solicitud de reanudar la convivencia, "de forma súbita, inesperada y por sorpresa, eliminando así toda reacción de la víctima, que no tuvo ocasión alguna de defenderse".

Añade que el procesado, de 64 años,  era plenamente consciente de sus actos al no considerar probado que la medicación que tomaba desde hacía ocho años para aliviar los dolores de columna le hubieran producido ni adicción ni ninguna patología mental.

Personalidad irascible y autoritario

Sobre la personalidad del acusado, la sentencia indica que "sus rasgos narcisistas le han impedido aceptar sus limitaciones, pero sin llegar a constituir un trastorno de personalidad; además, el mismo es impaciente, nervioso, irascible y autoritario, pero no se le ha apreciado ningún tipo e trastorno mental en el momento de los hechos".

Señala también que José Vicente M.H. "se ha mostrado en una posición de prepotencia de sí mismo y, con frecuencia, ha procedido a la descalificación de su esposa, sus hijos y su familia cercana, e incluso en ocasiones le ha gustado hacerse la víctima".

Durante la vista oral, tanto el fiscal como la Abogacía del Estado pidieron una condena de 18 años de prisión y una indemnización de 120.000 euros para los tres hijos, mientras que la acusación particular solicitó 20 años y 150.000 euros.

La Audiencia ha condenado al acusado, por un delito de asesinato con la agravante de parentesco y la atenuante de confesar los hechos, a 17 años de prisión y a la indemnización solicitada por el letrado de los herederos