Karzai promete que luchará contra la corrupción en Afganistán

• Karzai acaba de presentar la lista de los ministros de su nuevo Gobierno
• La mayoría de ministros repite en el cargo tras unas elecciones marcadas por las irregularidades

El presidente de Afganistán, Hamid Karzai, ha prometido que tanto él como sus ministros serán responsables ante el pueblo afgano en lo referente a la corrupción, un día después de presentar al Parlamento una lista con los miembros de Gobierno.

"Ellos (los ministros) serán responsables en lo referente a la corrupción y cualquier otro asunto. Seré responsable ante la nación afgana para prevenirlos o acabar con el problema", ha dicho Karzai en una rueda de prensa emitida por el canal público RTA.

Karzai ha comparecido junto al primer ministro belga, Yves Leterme, que se halla de visita en Afganistán, sólo un día después de presentar al Parlamento para su aprobación una lista con 23 de los 25 miembros que compondrán su nuevo gabinete.

Continuidad en el nuevo Gobierno afgano

La lista está marcada por la continuidad en la mayoría de los ministerios principales, como Defensa, Interior, Finanzas, Educación, Agricultura y Minas, aunque incorpora ocho caras nuevas y deja vacante la cartera de Exteriores.

"Intenté hacer del gabinete un espejo del pueblo afgano, para que todos los afganos puedan verse en su gabinete", ha añadido Karzai.

El Parlamento ha iniciado a puerta cerrada sus sesiones para la aceptación o rechazo de los candidatos propuestos por Karzai, un proceso que podría alargarse varias semanas y que en teoría incluye las intervenciones ante la Cámara de los designados.

Karzai ha renovado su mandato hace un mes, tras proclamarse vencedor de los comicios presidenciales, pero el proceso estuvo marcado por las irregularidades y las potencias extranjeras llevan tiempo exigiéndole una acción más decidida contra la corrupción.

Los analistas coinciden en que Karzai ha debido hilar fino para respetar los delicados equilibrios y presiones procedentes de las potencias presentes en Afganistán, pero también de los barones regionales que le dieron su apoyo antes de los comicios.