Gripe A, la primera pandemia del siglo XXI
- Los primeros casos se detectaron en México en abril de 2009
- La OMS declaró el 11 de junio oficialmente la pandemia de gripe A
Se cree que podría durar dos años e infectar a 2.000 millones de personas
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Un nuevo virus de la gripe con material genético de aves, cerdos y humanos puso en alerta a la Organización Mundial de la Salud (OMS) en el mes de abril de este 2009.
Se trata de una cepa de la gripe nunca vista hasta la fecha que despertó inmeditamente el fantasma de la pandemia y de la llamada 'gripe española' en 1918.
Con curiosidad y escepticismo el mundo fijó su mirada en México que se convirtió en epicentro informativo al registrar los primeros 60 muertos por la nueva "gripe porcina" y un millar de contagios.
Pronto comenzó a crecer la desconfianza entre los viajeros internacionales ante los primeros casos de contagio entre personas.
La primera semana de mayo, México se puso la mascarilla y la OMS trató de frenar el miedo al virus rebautizando la enfermedad como gripe A.
La primera pandemia de gripe en 40 años
En menos de 78 horas la OMS elevó el nivel de alerta de 3 a 5. La gripe se colocó al borde la pandemia y oficialmente se anunciaron 1.516 casos confirmados y 30 muertos en 22 países.
Las autoridades sanitarias pidieron entonces a los Gobiernos que no cerraran las fronteras y que reforzasen las medidas de higiene.
Los datos oficiales no eran capaces de reflejar el verdadero avance de la gripe A que en el mes de mayo llegó al sureste asiático, la zona más poblada del mundo.
El 11 de junio la OMS asumió que estamos oficialmente ante una pandemia, la primera en los últimos 40 años y según sus previsiones la gripe A podría durar dos años e infectar a 2.000 millones de personas.
La UE también lanzó su advertencia: el 50% la población continental puede padecer la enfermedad aunque "sólo unas personas la sufrirán de forma severa".
La gripe A llega a España
Los primeros contagios en nuestro país se infectaron tras viajar a México. El 27 de abril, un joven de Almansa se convirtió en el primer caso confirmado en España y Europa.
Mientras Zapatero pidió "tranquilidad y confianza", la gripe A comenzó a colarse a diario en los medios de comunicación, recogiendo el goteo lento pero constante de contagios y fallecidos por la pandemia.
A finales de junio Sanidad comenzó a dar un parte semanal de la evolución de la pandemia y estimó entonces que 717 personas habían pasado la enfermedad.
“El 30 de junio se confirmó la primera muerte por gripe A en España“
Hubo cierre de colegios, aislamientos de militares en cuarteles y turistas españoles en cuarentena en Pekín.
El 30 de junio se confirmó la primera muerte por gripe A en España, una mujer marroquí embarazada de 28 semanas y con antecedentes de asma, a la que un día antes se le había practicado una cesarea para salvar la vida de su hijo que no padecía la gripe.
Con la evidencia de que el contagio era ya inevitable, el Gobierno y la comunidad médica se esforzó por imponer cordura y calma y anunciaron que no se iban a cerrar colegios y que se vacunaría al 40% de la población.
Vigilando a la gripe A
La velocidad vertiginosa con la que el virus se expandió por el planeta, obligó a la OMS a cambiar el sistema de información sobre la pandemia.
A día de hoy no se hacen las pruebas a todo los casos sospechosos, sólo a los más graves. Ahora una Red de Médicos Centinela informa de la evolución por un sistema de cálculo de tasas estimadas.
Desde los 36,04 casos de gripe A por 100.000 habitantes que se registraron a finales del mes de julio, se ha llegado a alcanzar una tasa de 53,61 en septiembre, 77,88 en octubre, 243,71 en noviembre y 78,55 en diciembre.
En la última semana del año los fallecidos relacionados con la gripe han alcanzado los 256.
Comienzan las vacunaciones
Los grupos de riesgo, más sensibles a sufrir complicaciones de la enfermedad, han sido los primeros en ser vacunados.
El 16 de noviembre comenzó simultáneamente en toda España la campaña de vacunación y los medicamentos antivirales -reservados para su uso en hosiptales- volvieron a dispensarse en las farmacias.
Están llamados a inmunizarse alrededor de 10 millones de personas: personal sanitario, embarazadas, enfermos crónicos a partir de seis meses de edad y el personal de servicios esenciales. También, el personal de instituciones penitenciarias.
No parece que la vacuna convenza a todos, sobre todo por la falta de tiempo para comprobar los posibles efectos secundarios. A finales de noviembre la OMS anunció alergias graves por la vacuna en Canadá en un lote de 172.000 dosis.
En España, la mitad de la población de riesgo no se ha vacunado contra la gripe A ni piensa hacerlo.
En nuestro pais Sanidad está estudiando 150 posibles reacciones a la vacuna. Entre estas sospechas, se encuentran tres reacciones alérgicas, dos casos de parálisis facial, dos abortos y tres de convulsiones.
Un virus muy contagiosos, pero leve
Nadie está libre del contagio. La gripe A ha llegado al mundo del deporte, la música, el cine o la política.
Obsesión para muchos, negocio muy lucrativo para otros, el miedo a la pandemia ha modificado nuestros hábitos de vida.
Contra la gripe, telenovelas sin besos, notas escolares por correo, consultas sólo telefónicas, dispensador de agua bendita electrónico, fomento del teletrabajo, consejos para saludarnos sin tocarnos y limpieza obsesiva de manos y superficies.
“Afecta especialmente a jóvenes, embarazadas y enfermos crónicos“
Si algo que ha quedado ya claro, a pesar de que han muerto personas sanas, aparentemente sin patologías previas, es que la gripe A es una enfermedad muy contagiosa, pero más moderada que la gripe estacional.
Los síntomas son muy parecidos a la gripe común: fiebre alta, dolor de cabeza, tos, estornudos, dolores mucuslares y malestar general.
La mayor diferencia está en los grupos a los que afecta. Mientras que la estacional ataca sobre todo a los mayores, la gripe A es especialmente grave para niños menores de 5 años, enfermos crónicos, o embarazadas.
Un futuro impredecible
Para evitar el contagio el bombardeo informativo ha sido enorme.
Campañas en todos los medios de comunicación para aclararnos las dudas y respuestas sobre la nueva enfermedad, anuncios de cómo debemos lavarnos las manos, cómo estornudar o cómo deberíamos saludar.
Tampoco se han librado los personajes infantiles como Los Lunnis, de TVE, que nos enseñan consejos de higiene básicos.
“Por ahora, se han contabilizado al menos 9.596 muertos en el mundo“
Poco más podemos hacer. La evolución de la pandemia del virus H1N1 es impredecible y los últimos casos de mutación en el mundo, tres en España, han aumentado más aún la incertidumbre ante la primera pandemia de este siglo. ¿Estamos al final de la pandemia? ¿habrá más mutaciones? ¿habrá una segunda ola de virus?
A pesar de las incógnitas, lo cierto es que hay margen para el optimismo ante una enfermedad que ha demostrado ser más moderada de lo esperado y que nueve meses más tarde de registrarse los primeros casos refleja que la tasa de mortalidad no es superior a la de la gripe estacional.
Por ahora, se han contabilizado más de 11.500 muertes en el mundo por gripe A, frente a los 500.000 casos estimados de muertes anuales por gripe común.
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