Obama: "en última instancia, la responsabilidad es mía"
- El Presidente asume la responsabilidad por los fallos del sistema de seguridad
- Asegura que no fue culpa de un individuo o agencia
- Ordena cambios en el seguimiento de pistas, distribución y análisis de la información
- La responsable de Interior se reunirá con los aliados en España
El Presidente de EE.UU. ha asumido la responsabilidad última por los fallos de seguridad que permitieron que el nigeriano Umar Farouk Abdulmutallab estuviera a punto de hacer estallar un avión en pleno vuelo la pasada Navidad.
Obama ha señalado que está más interesado en corregir los errores que en buscar culpables. Asegura que el agujero de seguridad no se debió a un individuo o agencia concreta, sino que fue un fallo del sistema, y por tanto, es responsabilidad suya. De momento, no hay dimisiones.
En todo caso, hace un llamamiento a la unidad para no utilizar de forma partidista los fallos y pide no sucumbir a la mentalidad propia de un estado de sitio, que sacrificaría las libertades civiles en aras de la seguridad.
Es la segunda vez que el Presidente comparece esta semana y la Casa Blanca trata de desactivar las críticas de la oposición republicana a la política antiterrorista y minimizar el daño político. De ahí que Obama haya dicho explícitamente: "estamos en guerra con Al Qaeda".
Cuatro mejoras y más controles para evitar el desastre
Obama ha ordenado mejorar los procedimientos en cuatro áreas. En primer lugar, los servicios de Inteligencia deberán seguir todas las pistas. Siempre. Es la receta para evitar que se repita el primer error: estaban al tanto de que Al Qaeda en la Península Arábiga preparaba un atentado pero no se dedicaron suficientes recursos a la investigación. De hecho, Abdulmutallab se reunió con el clérigo radical Al Awlaki en Yemen, el mismo que pudo instigar la matanza de la base militar de Fort Hood en Texas.
En segundo lugar, todas las agencias deberán distribuir y compartir la información más rápidamente. Del mismo modo, se mejorarán los procedimientos de análisis para "conectar los puntos" recopilados y completar el dibujo. Otro de los fallos para impedir el atentado fue que no se procesó adecuadamente la denuncia del propio padre de Abdulmutallab, que denunció en la embajada estadounidense en Nigeria que su hijo había caído en las redes extremistas.
Y por último, se corregirán los fallos en las listas de sospechosos. Especialmente en las listas de individuos a los que se les prohibe volar a Estados Unidos. Abdulmutallab no estaba en ella pero sí en otra. El problema es que ni la CIA ni el Centro para el Contraterrorismo la revisaron a tiempo. El terrorista también tenía visado de entrada, por lo que se reformará el procedimiento para su concesión y revocación.
Reunión en España
A las cuatro recetas, se añade la inversión de mil millones de dólares para reforzar los controles en los transportes. Eso incluye la compra de más de 300 nuevos escaners, capaces de detectar explosivos. Algo, que como ha señalado Obama, no fue posible en el arco de metales del aeropuerto de Amsterdam.
En este sentido, la titular de Interior de la administración Obama, Janet Napolitano, ha avanzado que se reunirá con los aliados en Toledo, España, para reforzar las medidas de seguridad en el transporte aéreo.