El ex agente del CNI acusado de vender secretos a Rusia será juzgado a puerta cerrada
- La Audiencia Provincial de Madrid justifica la decisión en la seguridad nacional
- El abogado de Flórez cree "inaudito" que se celebre un juicio a puerta cerrada
El ex agente del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) Roberto Flórez, acusado de vender documentos secretos a Rusia, será juzgado a partir de este lunes a puerta cerrada, sin público ni medios de comunicación
Así lo ha notificado este viernes la Audiencia Provincial de Madrid, que justifica esta decisión en base a la seguridad nacional.
De este modo, el tribunal accede a la petición realizada por la Abogacía del Estado, a la que se sumó la Fiscalía,que había solicitado formalmente que las sesiones se celebren a puerta cerrada.
En la resolución, la sala afirma que en la causa obra "documentación protegida por la Ley de Secretos Oficiales, que ha sido necesario desclasificar".
Una circunstancia a la que el Gobierno accedió a cambio de "que se acuerde con ella el mayor grado de protección y reserva procesal que por su naturaleza se pueda adoptar".
Por esta razón, la Audiencia Provincial de Madrid considera necesario "adoptar las máximas garantías para que su contenido no trascienda públicamente y, entre ellas, la de que el juicio se celebre sin público ni medios de comunicación resulta necesaria para garantizar este fin y para no perjudicar la seguridad nacional".
Piden 12 años de prisión
Manuel Ollé, abogado de Flórez -que se había opuesto a la petición- ha manifestado que es "inaudito" que "en pleno 2010" se vaya a celebrar un juicio a puerta cerrada, una medida que, en su opinión, "vulnera los derechos fundamentales" de su representado, entre ellos el derecho al proceso debido.
La Fiscalía y la Abogacía del Estado piden para Roberto Flórez una pena de prisión de 12 años por un delito de traición a la patria.
De forma subsidiaria, la Abogacía ofrece la alternativa de que el presunto "topo" sea condenado sólo a cuatro años de cárcel si considera que los hechos únicamente son constitutivos de un delito de revelación de secretos.
La defensa del ex espía, por su parte, pide la absolución.
En el juicio, además del ex director del CNI Alberto Saiz, prestarán declaración varios agentes de los servicios secretos que participaron en la investigación que llevó a la detención de Flórez, pero no Petr Melnikov, número tres de la Embajada rusa en Madrid hasta octubre de 2003 y la persona a la que supuestamente vendió la información el acusado.
Sospechas de la existencia de un 'topo'
Flórez fue miembro del CNI entre marzo de 1991 y marzo de 2004, cuando solicitó su baja voluntaria. Durante este intervalo de tiempo trabajó en diferentes áreas y departamentos, "lo que le permitió acceder a información de muy distinta naturaleza así como establecer contactos personales y conocer la dirección informativa de numerosos colaboradores del CNI", asegura en su escrito la Abogacía.
Los sospechas sobre la existencia de un "topo" en el interior del departamento de inteligencia española surgieron después de que los servicios secretos rusos desbarataran hasta tres operaciones del CNI en el país, acciones que estaban destinadas a ampliar la red de informadores locales.
Flórez, detenido en julio de 2007 en Tenerife, permanece en prisión preventiva desde entonces.