Felipe González critica las "prisas electorales" del PP en la polémica sobre los inmigrantes en Vic
- El Defensor del Pueblo cree que lo "fundamental" son los derechos humanos
- Zapatero exige sanidad y educación al margen de la situación legal
El ex presidente del Gobierno Felipe González ha criticado al Partido Popular, aunque sin mencionarlo, por dejarse llevar por las "emociones irracionales" y las "prisas electorales" en la polémica sobre el empadronamiento de inmigrantes sin papeles en el Ayuntamiento de Vic, que finalmente cumplirá la ley y los registrará.
González ha afirmado que Europa debe afrontar el "desafío" de su pérdida de población, que pronosticó en 30 millones de personas activas en 2030 y de 50 millones en 2050 en su intervención en la Conferencia Inaugural del "Año Europeo de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social 2010" en Madrid.
El ex presidente ha señalado que el hecho de que en la última década el número de inmigrantes en España haya crecido hasta un 10% suscita ¿emociones irracionales que no nos deben hacer perder la perspectiva¿ porque, según ha añadido, la pérdida de población "se puede acercar a la insostenibilidad en términos económicos".
A este respecto, ha criticado el discurso de "no cabemos todos", "como si estuviéramos en el metro de Tokio en la hora punta". "Atención: dentro de 20 años nos faltarán 30 millones de activos y dentro de 40 años nos faltarán 50 millones de activos. ¿Cómo se resuelve eso? Ése es el desafío demográfico de Europa", ha apostillado.
González ha abogado por una política demográfica que haga sostenible el crecimiento europeo y "dé respuesta a un declive demográfico inexorable", para lo que ha considerado importante el papel de la mujer.
La cultura absurda de no contratar a una mujer
"Necesitamos a las mujeres en el mercado de trabajo y en la lucha contra el declive demográfico. Tiene que acabar esa cultura absurda de no contratar a una mujer joven porque se queda embaraza. Contrátela, por favor, y sobre todo si se va a quedar embazada", ha recalcado, ante las risas de los asistentes en el Salón de Actos del Ministerio de Sanidad y Política Social.
Por su parte, el Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, ha defendido el derecho de los inmigrantes indocumentados a empadronarse aunque estén en situación irregular, por lo que ha considerado una "falta de idoneidad" que el Ayuntamiento de Vic (Barcelona) pretenda restringirlo.
"Lo fundamental son los derechos humanos", ha dicho Múgica en declaraciones a los periodistas antes de asistir a un desayuno informativo con el lehendakari, Patxi López, en un hotel madrileño.
El Defensor del Pueblo ha recordado que la Ley de Extranjería estipula que para que un inmigrante se empadrone en un municipio basta con presentar un documento oficial válido, como el pasaporte, aunque tenga visado de turista.
"Ese pasaporte da lugar a que el inmigrante sea ilegal o legal, tenga acceso a la sanidad pública y sus hijos a la educación", ha subrayado.
Múgica ha añadido: "por tanto, todo lo demás es acompañamiento, que en este caso es falta de idoneidad para salvaguardar lo que es lo fundamental, que son los derechos humanos".
El Ayuntamiento de Vic, gobernado por CiU con el apoyo del PSC y ERC, quiere que los inmigrantes tengan que presentar la tarjeta que acredita su permiso de residencia en España y no sólo el pasaporte para apuntarse en el padrón.
Zapatero vuelve a posicionarse junto a los inmigrantes
Por su parte, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha aprovechado la conferencia inaugural del Año europeo de lucha contra la pobreza y la exclusión social para volver a criticar, sin citarla, la propuesta del Ayuntamiento de Vic de no empadronar a los inmigrantes en situación irregular.
En este sentido, ha considerado que para luchar en favor de la inclusión social es obligado que los países "democráticos y avanzados" faciliten sanidad y educación a todas las personas que vivan en su territorio, "más allá de su condición legal".
Ante la mirada del presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, de la ministra de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez, y del ex presidente Felipe González, presidente del Grupo de reflexión sobre el futuro de la UE, Zapatero ha recordado que la UE está cimentada sobre un modelo propio de bienestar social, con sistemas de sanidad universal, educación gratuita y seguridad social, "políticas universales para todas las personas".