El Gobierno haitiano realojará a 400.000 desplazados en poblados a las afueras de Puerto Príncipe
- Fleta 30 autobuses para realojar a los sin hogar en aldeas a las afueras
- Anuncia que este fin de semana abren los bancos por primera vez
- EE.UU. reabre parcialmente el puerto y usa cuatro aeropuertos para la ayuda
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Nueve días después del devastador terremoto que ha azotado Puerto Príncipe, el gobierno haitiano comenzará realojar a las decenas de miles de personas que se han quedado sin hogar en una serie de "poblados" de nueva creación, cada uno con capacidad para unas 10.000 personas, según ha anunciado el ministro haitiano del Interior, Paul Antoine Bien-Aime.
"El gobierno ha introducido un servicio gratuito de transporte. Una operación masiva está en marcha, hemos de trasladar a los sin techo", ha declarado el ministro.
El gobierno ha requisado treinta autobuses para transportar a los evacuados hacia el norte y el sur de Puerto Príncipe, con dos millones de personas de las cuales la Cruz Roja estima que 1,5 pueden estar sin hogar.
Inicialmente se alojará a unas 100.000 personas en 10 asentamientos situados cerca del barrio de Croix des Boquets. Aunque no hay plazo determinado, el ministro ha asegurado que la totalidad de estos traslados se harán "lo más pronto posible". En total, se espera realojar hasta a 400.000 desplazados.
Este anuncio llega después de las críticas de la población a la falta de respuesta del gobierno del Presidente René Préval a la hora de organizar la respuesta al seísmo.
500.000 en campamentos improvisados
La Organización Internacional de las Migraciones (OIM) calcula que unas 500.000 personas se refugian en unos 447 campamenos improvisados. En ellos, la mayoría de las personas no tienen techo, algunos han construidos precarios refugios y apenas tres de estos campamentos tienen agua potable.
De los 350 analizados por la OIM, solo 179 cuentan con material para dormir y tiendas de campaña y apenas tres con agua potable.
Este organismo ha subrayado que se han distribuido tiendas, sábanas y sábanas de plásticos procedentes de Estados Unidos, Japón y Turquía, pero que más material de asentamiento sería necesario.
"Las tiendas no funcionarán en mayo, cuando la larga temporada de lluvias comienza y después cuando llegue la temporada de huracanes, pero en este momento no tenemos mucha elección". ha declarado el portavoz de la OIM, Vincent Houver.
EE.UU. reabre el puerto
Mientras tanto, Estados Unidos sigue liderando la misión internacional en el país pese a la controversia generada en algunos países y con la encendida defensa del presidente haitiano, que ha dejado claro en una entrevista en el periódico francés Liberation que están asumiendo el papel que su ejecutivo les ha pedido.
Tras tomar totalmente el control del aeropuerto de Puerto Príncipe -del que ha expulsado a la prensa internacional- el ejército estadounidense ha anunciado que otros tres aeropuertos, el de Jacmel en la costa y dos en Santo Domingo, el de Barahona y el de San Isidro, están disponibles para la ayuda.
Además, se ha reabierto el puerto de Puerto Príncipe al tráfico, aunque de manera limitada para la llegada de ayuda humanitaria. A partir de este viernes se abrirá al tráfico comercial, una operación fundamental para que vuelva la normalidad al país ya que supondrá normalizar la entrada de ayuda y, sobre todo, de combustible.
Este hecho supondrá una reactivación de la aún insignificante actividad económica en el país, donde según informa el enviado especial de Radio Nacional, Fran Sevilla, empieza a haber comercio callejero pese a que no hay dinero con el que comprar.
Reabren los bancos
En este sentido, los bancos haitianos comenzarán a operar a partir del fin de semanas, según ha anunciado la ministra de Comercio, en otro gesto para visualizar al ejecutivo haitiano.
"Los bancos abrirán en las provincias el viernes y el sábado en Puerto Príncipe", ha desvelado la ministra a la agencia Reuters.
Aunque algunas sucursales bancarias están destruidas por el terremoto, los que están en pie compartirán los clientes con los destruidos para poder asegurar que fluye el dinero al público.
El Fondo Monetario Internacional ha estado trabajando con los donantes para que circule el dinero en efectivo en Haití de forma que la gente pueda comprar comida por sí misma y los funcionarios civiles que están trabajando sean pagados.
Sin embargo, las agencias de ayuda reconocen que el reto de la recuperación es enorme, ya que por mucho dinero que circule en los bancos, los haitianos tendrán poco que sacar: el 70% de ellos viven con menos de dos dólares al día.