Lola Dueñas, premio a la más castiza
- Su papel en Yo, también le vale el Goya como mejor actriz principal
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No ocupa portadas en las revistas ni los fotógrafos matan por inmortalizarla en las alfombras rojas, pero ya se ha convertido en una de las imprescindibles del cine español.
Algo tímida a la vez que espontánea, Lola Dueñas ha conseguido aunar el consenso de todos a la hora de reconocer su versatilidad como actriz. Sin hacer mucho ruido, ha ido escalando posiciones en una sólida carrera cinematográfica que ya le ha dado importantes recompensas.
Pocas actrices pueden presumir de tener, con 38 años, una Concha de Plata, otorgada en el Festival de San Sebastián, por su papel en Yo, también, dos Goya por su trabajo en Mar adentro y por Yo, también y el premio a la mejor actriz (compartido con el resto de actrices de Volver) en el Festival de Cine de Cannes.
En los Goya de este año era, sin duda, una de las favoritas en la categoría de actriz principal por su interpretación en Yo, también, donde llena la pantalla con otra de las sorpresas del cine español, el actor con Síndrome de Dawn Pablo Pineda, también nominado como mejor actor revelación. No ha habido sorpresas y se lo ha llevado.
Reconoce que nunca le habían dado un papel como el de Laura, la alocada y promiscua protagonista en Yo también. También decía que lo tenía difícil, la terna de actrices que le acompañaban en estos Goya no era precisamente fácil de batir. Competía con Penélope Cruz (Los Abrazos Rotos), Maribel Verdú (Tetro' y Rachel Weistz (Ágora). Tras "actrizonas", como la propia Dueñas dice.
Una veintena de películas
Hija del también actor Nicolás Dueñas, empezó en el mundo del espectáculo desde niña con un papel de monaguillo en una zarzuela en la trabajaba su padre. Ha mamado la actuación y aunque ha trabajado de camarera y cocinera, siempre tuvo claro cual era su camino a seguir.
Ya cuenta con una veintena de películas en las que ha trabajado con los más grandes, entre ellos, Pedro Almodóvar y Alejandro Amenábar. Bajo las órdenes de éste último encarnó, mejor dicho, bordó uno de los mejores papeles de su carrera: el de Moncha, la novia de Ramón Sampedro.
Almodóvar, con el que ha trabajados dos veces, ya la ha incluido en su exclusivo universo de musas femeninas.
Antes que estos importantes papeles, trabajó en cintas como Mensaka, Marta y alrededores, Días de fútbol o Fuera de carta, entre otras.
En televisión, ha participado en series como Periodistas o Policías en el corazón de la calle. Reconoce que su reto pendiente es el teatro, a pesar de que se ha subido a las tablas en varias ocasiones.
Entre vivir un amor y hacer un peliculón se queda con lo último, según ella misma dice. Su gran amor es el cine y la gala de los Goya se celebra el día de los enamorados, así que ya sabemos cual sería su mejor regalo.