Francia utilizó a sus soldados como cobayas en los ensayos nucleares que hizo en los 60

• Fueron utilizados para estudiar los efectos de la bomba atómica
• Al menos 300 peronas fueron obligadas a participar

Primero se hacía explotar la bomba y, 20 minutos después, los soldados tenían que salir de sus refugios y aproximarse hasta 700 metros del lugar en el que se había producido la explosión.

Así, sin nada más que una máscara para el polvo, debían actuar las personas que fueron utilizadas en el experimento.

Son los datos extraídos del informe de 1998 que esta mañana revelaba el diario francés Le Parisien. El objetivo estaba claro: comprobar de qué modo se verían afectados los hombres, física y psicológicamente, por el arma atómica.

El documento, de 260 páginas, fue redactado por un soldado anónimo dos años antes de que el entonces presidente francés, Jacques Chirac, ordenara que Francia no continuara con más invesitigaciones sobre armas atómicas.

Además,el informe narra cómo las tropas francesas implicadas en estas investigaciones fueron obligados a manipular sustancias para los ensayos sin protección básica. Por ello, también se vieron sometidos a la inhalación de gases.

Se hicieron un total de 210 experimentos entre febrero de 1960, en el Sáhara, y 1966 en el sur de Argelia.

Las conclusiones que sacaron entonces fueron que los soldados eran perfectamente capaces de continuar combatiendo a menos que su moral se hubiera visto excesivamente afectada.

Las reacciones en la actualidad

El ministro de defensa francés, Hervé Morin, declaraba al diario francés que desconocía la existencia del informe y que las personas que se vieron afectadas entonces recibirán una indemnización gracias a una ley aprobada durante su mandato.

Eso sí, deberán demostrar que padecen una de las 18 enfermedades que han sido determinadas como consecuencia de las explosiones atómicas.

Sólo así podrán recibir dicha indemnización para la que el gobierno francés ha reservado 10 millones de euros.

Hervé ha recordado también que las emisiones que se recibieron fueron muy bajas y ha destacado el papel de Francia en la lucha por la bomba atómica. "Fue el símbolo de la constancia de una nación que quería adquirir los medios de su propia soberanía" , declaraba al diario francés.