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La anemia del salmón chileno dispara los precios

  • Noruega ha aprovechado para subir los precios y aumentar cuota de mercado
  • Chile, el segundo exportador mundial, ha visto reducida su producción un 75%

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Workers clean salmon carcasses on a cleaning line at  the Acuinova Chile salmonera company located some 1,625 km  south of Santiago
Trabajadores de Acuinova Chile, filial de Pescanova, limpian filetes de salmón.

Los precios del salmón se han disparado en los supermercados. El culpable es un virus llamado ISA que está diezmando los salmones de Chile, segundo productor mundial.

Noruega, el mayor exportador de salmón del mundo, ha aprovechado la coyuntura para ganar cuota de mercado y pasar del 50% al 70% en 2010. Este país nórdico también ha aumentado el precio del pescado un 32,5% hasta los 4,6 euros por kilo en los últimos doce meses.

Durante el mayor pico de producción, Chile llegó a vender 650.000 toneladas anuales de salmón, según datos del delegado de la Corporación de Fomento chilena (CORFO), Tomás Pablo Roa, facilitados a RTVE.es.

La producción chilena en 2009 cayó hasta las 200.000 toneladas, un 75% menos, y este año está previsto que repunte la producción y "las ventas alcancen las 245.000 toneladas".

"Exterminio total"

Roa apunta que la anemia infecciosa que desde 2007 ha producido "el exterminio total" de las granjas marinas chilenas proviene del "ingreso de óvulos infectados de un país, no de la Unión Europea, sino de la EFTA".

El virus ISA, que no afecta a los humanos si comen salmones infectado, ha provocado que desde hace dos años "todas las granjas marinas se cambien de ubicación" se introduzcan controles de cultivo y nuevas especies.

El problema es la sobreexplotación del recurso

El biólogo chileno del CSIC, Aldo González, ha dicho a RTVE.es que el principal problema es la "sobreexplotación del recurso". El hacinamiento de la población de salmones, hace que "las bacterias del tracto digestivo de los peces, se viertan en el fondo, se mezclen con el pienso y proliferen las bacterias y rickettsias".

González apunta que "la disculpa que dan los chilenos es que los noruegos les vendieron animales infectados" pero matiza que la especie usada, el salmo salar, ya estaba debilitada, y que el virus hizo que los salmones "bajaran de peso, enfermaran, no crecieran y perdieran el color".

Fiebre del salmón

Este biólogo también duda de la rentabilidad de la producción ya que calcula que "para producir un kilo de salmón hacen falta cuatro kilos de jurel de alimento" porque si no "no hay manera que crezca a esas velocidades".

El investigador compara lo ocurrido en Chile con el salmón con la fiebre del oro en California y con la enfermedad de las vacas locas, González afirma que la solución es "partir de cero" y establecer un plan integral de buenas prácticas "si quedan aguas sin contaminar".

Con el reclamo del rápido enriquecimiento "mucha gente metió su dinero en las granjas de salmones y ahora están de rodillas" y añade el biólogo del CSIC que sin investigación científica "los países están sepultados desde el punto de vista de la producción".

Empresas españolas

Precisamente para recuperar el sector, Chile quiere atraer inversiones y ha invitado a una decena de empresas españolas biotecnológicas y de las industrias auxiliares a una feria que tendrá lugar a finales de marzo. Entre las que han confirmado su asistencia, según el responsable de CORFO, están Farm Bío Control y Zeu Inmunotec de Zaragoza, Taxon de Murcia, Litoral de Barcelona y Solutex de Madrid.

Las granjas de Pescanova no se han visto muy afectadas

Roa ha destacado la implantación de Pescanova en la industria auxiliar del procesamiento del pescado, a través de su filial Acuinova Chile, y subraya que las granjas de salmones proveedoras de la empresa española "no se han visto muy afectadas porque estaban más al sur" y el virus ha tenido mayor virulencia en la zona de Puerto Montt y Chiloé.

El responsable chileno reconoce que las exportaciones a Estados Unidos, su principal mercado, "se han resentido por la enfermedad", una circunstancia que pueden aprovechar para ganar cuota de mercado Canadá y Reino Unido que juntos suman el 20% de la producción mundial.