Marruecos ofrece a los golpistas de Níger conceder asilo al presidente derrocado

• La junta miliar está estudianto la propuesta magrebí
• Los golpistas se han comprometido a convocar elecciones

El portavoz de la Junta Militar que ha tomado el poder en Níger, el coronel Abdulkarim Gukoye, ha anunciado que Marruecos ha propuesto conceder asilo en el país magrebí al presidente nigerino derrocado por los golpistas, Mamadou Tandja.

En una conferencia de prensa en Niamey, Gukoye ha indicado que los dirigentes del denominado Consejo Supremo para la Restauración de la Democracia (CSRD) -integrado por el grupo de oficiales que lideraron el asalto al Palacio Presidencial- no han respondido a la propuesta marroquí, que están todavía estudiando.

Una delegación del Gobierno de Marruecos se ha entrevistado en Niamey con el comandante Salou Djibo, nombrado el lunes jefe del Estado y del Gobierno por el CSRD durante un "período de transición" para crear nuevas instituciones en el país, según la radio estatal.

Djibo se encargará de nombrar a los diferentes ministros y de crear un órgano encargado de elaborar un nuevo Código Penal y una nueva Constitución, que será sometida a referéndum popular, según el CSRD, que no precisó la duración de ese "período de transición".

Los golpistas se han comprometido a regresar al orden constitucional y a celebrar elecciones, aunque tampoco han fijado fecha para ello.

Retenido en un cuartel a las afueras

Una coalición que agrupa a diferentes partidos de la oposición a Tandja organizó el sábado en la capital nigerina una multitudinaria manifestación de apoyo a los autores del golpe de Estado y abogó por unas elecciones "libres y transparentes".

Aunque algunos dirigentes capturados el día del golpe han sido ya puestos en libertad, el presidente derrocado, Mamadou Tandja, se encuentra todavía retenido en un cuartel militar de las afueras de la capital, así como seis de sus ministros.

Los militares sublevados derrocaron al presidente nigerino tras asaltar el Palacio Presidencial el pasado jueves cuando éste celebraba un Consejo de Ministros extraordinario.

Tras retener a Tandja y a varios miembros del Gobierno, decretaron el toque de queda, suspendieron las garantías constitucionales y cerraron las fronteras del país, aunque poco después volvieron a reabrirlas.