El abogado de la mujer de Correa defenderá a Garzón ante el Supremo por los cobros en EEUU
- Defendió a Carmen Rodriguez por Gürtel ante la Audiencia y el TSJM
- Garzón ha pedido al CGPJ que no le suspenda y acusa al PP de estar detrás
El abogado y ex fiscal de la Audiencia Nacional, Enrique Molina, defenderá al juez Baltasar Garzón en la causa abierta en el Tribunal Supremo (TS) contra el magistrado en relación con el dinero que presuntamente percibió del Banco Santander durante su estancia en la Universidad de Nueva York, entre 2005 y 2006.
Según ha informado Cristina Ónega, el abogado Molina ha asistido a Carmen Rodríguez Quijano, la esposa del presunto cerebro del "caso Gürtel", Francisco Correa, ante la Audiencia Nacional y ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid.
Molina sustituye en la defensa de Garzón al letrado Gonzalo Martínez-Fresneda, que ahora se centrará en las otras dos causas abiertas en el TS contra el juez por investigar las desapariciones durante la Guerra Civil y el franquismo y por ordenar intervenir las comunicaciones en prisión entre varios imputados en el "caso Gürtel" y sus abogados.
El pasado martes el Tribunal Supremo impuso a los abogados José Luis Mazón y Antonio Panea una fianza de 6.000 euros para ejercer la acción popular en esta causa. Además, la Universidad de Nueva York salió en defensa de Garzón asegurando que no había recibido dinero del Santander.
Tres causas abiertas ante el Supremo
Además de por su investigación en las desapariciones durante el Franquismo y los cobros en Nueva York -por las que el Consejo General del Poder Judicial ha abierto una investigación para decididr su suspensión temporal-, Garzón está siendo también investigado por ordenar las grabar las conversaciones en prisión entre los imputados por Gürtel y sus abogados.
En ese sentido, el Ministerio Fiscal salió de nuevo en defensa de Baltasar Garzón y pidió el archivo de la tercera querella admitida por el Tribunal Supremo
En sus alegaciones al el Poder Judicial ante su posible suspensión, Garzón ha asegurado este viernes que detrás de las causas abiertas contra él en el Tribunal Supremo hay "una cruel campaña de desprestigio" orquestada, entre otros, por el Partido Popular.
Además, ha pedido que se abstengan de dar su opinión en su causa tres de los vocales del CGPJ, Margarita Robles, Gema Gallego y Fernando de Rosa, a los que considera "sus enemigos". En caso de que no se abstenga, ha amenazado con recusarles.