Quince familias reciben los restos de presos republicanos enterrados en Burgos en la Guerra Civil
- Los restos han sido entregados a las familias en el Ateneo de Madrid
- Tras años de búsqueda los familiares han consegudo la exhumación de 114 personas
Quince familias recibieron hoy los restos de sus seres queridos desaparecidos durante la Guerra Civil y el franquismo en la provincia de Burgos, que permanecían enterrados desde el conflicto.
En un acto celebrado en el Ateneo de Madrid, la Agrupación de Familiares y Amigos de Fallecidos en la Prisión de Castigo de Valdenoceda entregó a sus familias, envueltos en la bandera republicana, los restos de 15 presos que permanecían enterrados en esta localidad del norte de Burgos.
Valdenoceda alojó, desde 1938 a 1943, una de las prisiones de castigo más duras de la época de la posguerra. Se tiene constancia documental (a través del Registro Civil) del fallecimiento en el interior de la prisión de al menos 153 personas, según informó en un comunicado el colectivo.
Esas 153 personas fueron enterradas por sus propios compañeros en un solar, propiedad de Instituciones Penitenciarias que, en 1989, pasó a formar parte del Cementerio Parroquial.
Los nuevos enterramientos de vecinos del pueblo se realizaron, desde ese año, 1989, sobre los de los presos.
La Agrupación de Familiares y Amigos de Fallecidos en la Prisión de Valdenoceda consiguió la exhumación de 114 personas, de las cuales 15 han sido entregadas hoy a sus familiares, uno más ha sido identificado pero aún no ha podido ser exhumado y 10 más han conseguido identificación osteológica.
Tras estos estudios, la Agrupación de Familiares y Amigos de Fallecidos en la Prisión de Castigo de Valdenoceda sostiene que al menos 39 personas han quedado enterradas debajo de los enterramientos nuevos que se produjeron desde 1989.