Terry Gilliam rodará este año 'El hombre que mató a don Quijote' en España
- Robert Duvall encarnará a Alonso Quijano
- Rodará en España y busca actores españoles
El director de cine y ex miembro de Monty Python Terry Gilliam retoma, enérgico, su malogrado proyecto El hombre que mató a don Quijote, en el que Robert Duvall encarnará a Alonso Quijano y del que se ha caído un muy ocupado Johnny Depp.
"Johnny tiene que hacer películas demasiado grandes como para dedicarse a esta pequeña. No puedo esperarle, me estoy haciendo muy viejo y voy a morir muy pronto", explicaba un irónico Terry Gilliam a la agencia Efe.
El mes pasado, el director de Brasil estuvo en España, de donde quiere conseguir una parte importante de la financiación del filme, que espera comenzar a rodar el próximo otoño.
“En este momento estoy buscando jóvenes actores españoles“
"Parece que vamos a intentar contar con mucho dinero español de manera que la película se ruede en Alicante, Valencia y Madrid. En este momento estoy buscando jóvenes actores españoles", ha sostenido.
El proyecto retoma otro rodaje frustrado de 2000
En el año 2000, el proyecto de Gilliam naufragó al concatenar una serie de hechos desafortunados.
En primer lugar, el actor que encarnaba al caballero de la triste figura, el francés Jean Rochefort, tuvo que ser operado de una hernia y se vio abocado a dejar el trabajo porque no podía montar en caballo.
Por si fuera poco, el rodaje se vio afectado por una riada que destrozó los escenarios y por el vuelo de aviones militares que interrumpían los diálogos.
Ante tanta adversidad, Gilliam tiró la toalla en otoño de 2000. Sin embargo, si nada se cruza en el camino, el cineasta se quitará esta espina clavada diez años después de su primer intento.
Queda por ver qué universo quijotesco ofrece el imaginativo director.
“Intento dejarte preguntas en la cabeza“
"Como cineasta (...) cuento una historia y espero involucrarte, implicarte y hacerte pensar. Algo que intento hacer con mis películas, cualquiera que sea, es dejarte preguntas en la cabeza, ideas que te hagan pensar y que no se vayan con el viento", ha indicado el realizador de Doce monos.
A Gilliam le "preocupa" el rumbo que está tomando el cine desde hace tres décadas, en el que los universos de la pantalla cada vez distan más de la realidad.
El director ha explicado que en los años 80 las películas empezaron a alejarse de la realidad con personajes que no eran superhéroes pero "podían caerse desde una altura de 100 pies -alrededor de 30 metros- y sobrevivir".
De los roles interpretados por Silvester Stallone, Bruce Willis o Arnold Schwarzenegger, se pasó en la década de los 90 a auténticos superhéroes que podían volar.
“Una película tiene que ser verosímil en relación con la realidad“
"No sé en qué punto estamos ahora, qué está pasando, pero es un mundo raro. Lo que me preocupa es que hacemos películas que distan mucho de la realidad y para mí, no importa cuándo hagas una película o qué película sea, tiene que ser verosímil en relación con la realidad y opino que los filmes están mintiendo actualmente acerca de lo que la realidad es", ha sostenido.
Personajes como los de Avatar no le parecen reales
Y eso que para él la verosimilitud no es una cuestión de fidelidad visual: "No sé si el fotorrealismo es necesario. Las marionetas y los dibujos animados nos gustan porque no son realistas y nos permiten llevar un personaje más allá y aun así podemos sentirnos identificados con ellos".
Por ejemplo, a Gilliam los personajes de Avatar no le parecen reales, mientras que sí le resultan creíbles los de la cinta de animación Up, aunque sus cabezas "parezcan un cubo": "Reacciono con ellos de una forma que no consigo con la bien construida y tecnológicamente extraordinaria Avatar