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Muere el ex primer ministro nepalí Girija Prasad Koirala a los 85 años

  • Fue jefe de Gobierno cinco veces y destacado impulsor de la paz en Nepal
  • Con él se logró llevar a la guerrilla maoísta a la mesa de negociación

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El ex primer ministro nepalí Girija Prasad Koirala, destacado impulsor del proceso de paz en Nepal y una de las figuras políticas más importantes del país, ha muerto este sábado a los 85 años de edad debido a una infección pulmonar, ha informado su médico personal, Man Bahadur Khatri Chettri.

La noticia de la muerte ha sido asimismo confirmada por su hija y actual ministra de Exteriores del país, Sujata Koirala, según la televisión estatal Nepal TV.

El que fuera jefe de Gobierno de Nepal en cinco ocasiones (1991-1994, 1998-1999 -encabezó dos Ejecutivos distintos-, 2000-2001 y 2006-2008), sufría una obstrucción pulmonar crónica que se agravó hace unos días, por lo que fue hospitalizado.

Tras experimentar una leve mejoría, fue dado de alta el pasado miércoles y se instaló en el domicilio de su hija Sujata, quien además de dirigir la cartera de Exteriores es viceprimera ministra de Nepal.

El Partido del Congreso Nepalí, la formación más antigua del país, que Koirala presidía, ha informado de que el cadáver del histórico líder será incinerado este  domingo, según los medios nepalíes.

La muerte de Koirala deja un vacío importante en el panorama político nepalí, en un momento en el que el país se prepara para la redacción de su nueva Constitución, uno de los puntos clave del acuerdo de paz de 2006 que puso fin a 10 años de guerra civil entre el Gobierno nepalí y la guerrilla maoísta.

Koirala accedió al poder en 1991, año en el que se restauraba la democracia

El líder accedió por primera vez a la jefatura de Gobierno en 1991, año en el que fue restaurada la democracia en el país después de que en 1960 el rey Mahendra prohibiera los partidos políticos.

Koirala fue uno de los principales responsables de llevar a la guerrilla maoísta a la mesa de negociaciones tras diez años de lucha armada y rubricó el acuerdo de paz de 2006, cuya letra prevé, entre otros puntos, la redacción de una nueva Carta Magna y la integración de los antiguos combatientes en las fuerzas de seguridad del Estado.

A pesar de no ocupar ningún cargo oficial, el papel clave de Koirala en el proceso de paz y en las conversaciones para la redacción de la nueva Constitución le valieron el reconocimiento como líder político de los distintos partidos del arco parlamentario nepalí.