Los restos óseos hallados en el pozo donde se buscó a Sara Morales "no son humanos"

• Los investigadores dan por finalizada la búsqueda en esta zona
• La policía precinta el pozo tras hallar huesos de menor tamaño

La Policía da por terminada la búsqueda de los huesos del pozo en Jinamar

Los restos óseos hallados en el pozo de Jinámar (Gran Canaria),  dentro de la investigación por la desaparición de Sara Morales, no  son humanos, según han confirmado fuentes de la  investigación. La búsqueda ha sido dada por finalizada y no se ha encontrado "ningún esqueleto humano", tal y como buscaban las fuerzas y cuerpos de seguridad desde la  mañana del lunes en el marco de la investigación por la desaparición  de Sara Morales, según ha explicado la jefa superior de Policía de  Canarias, Concepción de Vega.

Las dimensiones y características de los huesos encontrados hacen  descartar, según las mismas fuentes, que correspondan a los dos niños desaparecido en la isla, Sara Morales y Yeremi Vargas, a la espera de  la prueba forense.

"Damos por finalizada la búsqueda en el pozo porque, según los  especialistas en homicidios, entendemos que no puede haber ningún  esqueleto humano en el lodo que queda. El cuerpo humano tiene más de  200 huesos y en la zona que queda en la que se trabaja con manos y  palas no queda ningún resto. Entendemos que no puede haber partes importantes de ningún cuerpo humano que es lo que presuntamente  estaríamos buscando", aseguró De Vega.

La jefa superior de la Policía en Canarias explicó que lo único  que han encontrado son "algunos restos y algún hueso de menor tamaño"  que se han remitido para su análisis. 

Dijo además que dan la investigación en el pozo por finalizada y precintan el mismo porque, según los especialistas, en el lodo que queda no puede haber un cuerpo humano.

Añadió que también se precinta por una cuestión de seguridad, ya que el pozo podría reventar en cualquier momento por la presión del agua en las compuertas que se sellaron para impedir que dos galerías siguieran anegando la oquedad, por lo que ya no es posible garantizar la seguridad de los agentes que trabajaban en su interior.

Una veintena de efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) se sumaron a la búsqueda a principios de semana, después de que el viernes pasado fueron hallados unos huesos en este pozo de un caserón abandonado en Gran Canaria, durante los trabajos de búsqueda del cuerpo de la adolescente Sara Morales, desaparecida en 2006, cuando tenía 14 años.

Se intenta llegar a una bolsa de la que una cámara de rayos-x captó una imagen de lo que podría ser un hueso radio humano, compatible además con una menor de 17 años, informa TVE.

Análisis de los restos encontrados

Los restos óseos encontrados en el pozo fueron trasladados al Instituto de Medicina Legal de Las Palmas para su investigación y, una vez allí, se les someterá a un diagnóstico de especie para determinar si son humanos o no, indicaron fuentes policiales.

Posteriormente se hará una prueba de género para determinar su sexo y su edad y, por último, una prueba de ADN.

Las fuentes policiales ha indicado que las labores de búsqueda de los dos menores desaparecidos en Gran Canaria, Sara Morales y Yeremi Vargas, continúan su curso al margen de las labores policiales desarrolladas estos días en el pozo de Jinámar.

El subdelegado del Gobierno en Las Palmas, Vicente Oliva, ha resaltado que el pozo quedará precintado y ha destacado la gran cantidad de "escombros, hierros y bidones" que había en su interior y que dificultaron enormemente las tareas de búsqueda.