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La operación puesta en marcha para rescatar al sargento Moncayo "avanza bien"

  • El operativo va rumbo a un punto de la selva donde las FARC entregará al rehén
  • Su padre es el destacado activista 'caminante por la paz'

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Los colombianos esperan que hoy se ponga fin a una de las historias más dramáticas de los rehenes de las FARC

El helicóptero brasileño con la misión humanitaria que recogerá al sargento Pablo Emilio Moncayo ha partido ya hacia un punto de la selva donde las FARC entregará este martes al rehén, cautivo hace doce años.

Tras mejorar las condiciones climatológicas y con tres horas de horas de retraso a causa de las fuertes lluvias en la zona, la misión ya está en marcha.

El alto comisionado de paz en Colombia, Frank Pearl, ha confirmado este martes que el operativo, "avanza bien".

Pearl ha dicho que el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) será el encargado de confirmar que Moncayo ha sido entregado a la misión humanitaria, integrada además por la senadora Piedad Córdoba y un representante de la Iglesia católica.

También ha señalado que las condiciones climatológicas han mejorado en la zona de entrega del rehén, en algún lugar de las selvas del sur de Colombia que sólo conocen los integrantes de la misión humanitaria.

Tres horas de retraso

Tras mejorar las condiciones meteorológicas y con tres horas de horas de retraso por las fuertes lluvias en la zona, el helicóptero, comandado por el coronel brasileño Carlos Aguiar, quien participó en otras misiones de liberación de rehenes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), partió del aeropuerto de Florencia a las 11.15 hora local (18.15 hora española).

Se prevé que en unas tres horas aproximadamente la aeronave regresará a Florencia, en el sureño y selvático departamento de Caquetá, con Moncayo como un hombre libre.

La misión está integrada por la senadora Piedad Córdoba, mediadora con las FARC, dos delegados del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), el obispo Leonardo Gómez, en representación de la Iglesia católica, y seis militares brasileños.

Antes de partir, Córdoba declaraba que partía en busca de Moncayo, uno de los dos rehenes más antiguos en poder de la guerrilla con doce años de cautiverio, con un rosario para pedir a Dios "que todo salga bien".

"Ya cerraron las puertas del helicóptero, monseñor está rezando con nosotros, vamos felices por Pablo Emilio", contaba Piedad Córdoba desde su Twitter.

Mientras partía el helicóptero, el profesor Gustavo Moncayo, padre del rehén, elevó sus brazos encadenados, tomaba fotografías a la aeronave y se abrazaba emocionado a su esposa e hijas.

Gustavo Moncayo, el conocido como "Caminante por la Paz" colombiano y padre del secuestrado por las FARC, Pablo Emilio Moncayo, concedió una entrevista a TVE en noviembre de 2007. Moncayo acababa de realizar una Marcha por la Paz en la que recorrió a pie mil kilómetros exigiendo un acuerdo humanitario. Eran los tiempos en los que el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, fue autorizado por el Gobierno colombiano para actuar como mediador en el conflicto.

El sufrimiento del caminante

La senadora, desde la aeronave, le hacía señas para que empezara a cortar esas cadenas, las que ha portado alrededor de su cuello y sus manos, y similares a las que llevan los secuestrados en las selvas, en señal de protesta por el drama del conflicto colombiano.

El helicóptero también ascendió entre los aplausos de los integrantes de Colombianos y Colombianas por la Paz (CCP), movimiento que lidera Córdoba, y de la Asociación Colombiana de Familiares de Miembros de la Fuerza Pública Retenidos y Liberados por Grupos Guerrilleros (Asfamipaz).

Antes, el Gobierno colombiano había propuesto retrasar hasta el miércoles el operativo de liberación del sargento por las lluvias, aunque finalmente ha podido comenzar el rescate por una mejora de las condiciones climatológicas.

No habrá más liberaciones unilaterales

Las Fuerzas Militares de Colombia suspendieron desde el pasado lunes a las 18.00 hora local (01:00 hora española) todas las operaciones en una zona selvática del sur del país para permitir la liberación del sargento Moncayo, como hizo el domingo cuando fue liberado el soldado Josué Daniel Calvo, que llevaba algo menos de un año en poder de la guerrilla.

Las FARC han dicho que a partir de ahora no habrá más liberaciones unilaterales y que lo que se impone es un canje humanitario de rehenes por guerrilleros presos.

El presidente colombiano, Álvaro Uribe, ha respondido que está dispuesto al acuerdo humanitario siempre que los guerrilleros liberados no vuelvan a delinquir.