Enlaces accesibilidad

El 'número dos' del Vaticano y no el Papa encubrió los abusos a niños sordos en EE.UU.

  • Destacó las dificultades que podría provocar 'airear' el proceso en 1996
  • Los documentos del Vaticano han sido publicados por 'Die Zeit'

Por
El Papa saluda a Bertone en un concierto celebrado el 19 de marzo en el Vaticano.
El Papa saluda a Bertone en un concierto celebrado el 19 de marzo en el Vaticano.

Fue Tarsicio Bertone, el número dos de Ratzinger cuando éste presidía la Congregación para la Defensa de la Fe, y no su jefe quien decidió frenar la condena y expulsión del sacerdocio del padre Peter Murphy por sus abusos continuados de los niños sordomudos de la escuela que dirigía en Milwakee,en los Estados Unidos.

Así lo recoge el semanario Die Zeit, que ha recibido copias de las cartas que envió en 1996 a Joseph Ratizger el entonces obispo de Milwakee, Rembert Weakland, y a Bertone,sobre el caso Murphy.

Unas cartas que, según Die Zeit, cayeron en manos de su ayudante más directo, Bertone ,hoy secretario de Estado, segundo en el escalafón Vaticano.

Fue Bertone,según Die Zeit, quien desaconsejó en el medio del mayor secreto,apartar a Murphy del sacerdocio y responder a las demandas de las familias de las víctimas,recomendando además el mayor de los silencios para evitar la propagación del escándalo en los Estados Unidos.

Benendicto XVI fue señalado por el New York Times el pasado lunes como el responsable de dilatar el castigo a Murphy, acusado de abusar de hasta 200 niños mientras trabajaba en una escuela católica dependiente de la archidiócesis de Milwakee entre 1950 y 1974.

No quería aumentar el escándalo

Die Zeit publica 20 páginas de los documentos en facsímil en su página web, en los que el periodista de la publicación Patrick Schwartz subraya que "en contra de lo que se había pensado, no fue el actual Papa quien éncubrió el caso, sino Bertone".

Según las transcripciones, sería Bertone el que estaba al cargo y habría tratado de evitarle un dolor de cabeza a su jefe.

La correspondencia muestra que Murphy fue despedido tras ser acusado de delitos sexuales en 1974 y que los obispos estadounidenses solo empezaron el proceso contra él en un tribunal eclesiástico en 1996 acusado de pedirle sexo a los menores durante el sacramento de la Penitencia.

La versión de la transcripción detalla cómo Bertone, secretario de la Congregación para la Doctrina de la Fe en ese momento, advertía a los obispos estadounidenses de la dificultad de llevar a cabo un juicio "en estricto secreto"  y de presentar pruebas y testimonios "sin aumentar el escándalo".

El Vaticano dice que no es nuevo

El Vaticano ha respondido diciendo que esta investigación no va más allá de lo que ya publicó el New York Times la semana pasada y que entonces ya dio una respuesta, según el portavoz de la Santa Sede, Federico Lombardi, informa el corresponsal de RNE en Roma, Iñaki Díez.

El propio Lomba aseguró que como Murphy era anciano, estaba mal de salud, vivía aislado y hacía más de 20 años que se habían producido los hechos, la Congregación indicó al arzobispo de Milwaukee que actuara en el asunto pero limitándose a retirarle de su función ante su grave estado. Murphy murió 4 meses después