Condenado a 34 años el etarra Olarra Guridi por ordenar el asesinato del doctor Cariñanos
- Es culpable de asesinato, teniencia ilícita de armas y pertenencia a banda armada
- La Audicia Nacional considera probado que fundó el "comando Erraia
La Sección Tercera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ha condenado a 34 años de prisión al antiguo jefe de comandos de ETA Juan Antonio Olarra Guridi por haber ordenado el asesinato a tiros del médico y militar Antonio Muñoz Cariñanos, perpetrado en su consulta de Sevilla en octubre del año 2000.
Los magistrados de la Sección Tercera, presididos por Alfonso Guevara, han encontrado a Olarra Guridi culpable de los delitos de asesinato, tenencia ilícita de armas y falsificación en documento oficial.
El tribunal considera probado que Olarra Guridi propuso en 1999 a Jon Igor Solana y Harriet Iragui la formación del denominado "comando Erraia". Los dos etarras recibieron entonces cursillos sobre armamento, manejo de explosivos y robo de coches.
La Audiencia considera que la autoría de Olarra Guridi en el asesinato del militar es "por influencia decisiva" y ve "inverosímil" que Solana negara durante la celebración del juicio que Olarra era el instigador de la acción principal y las coordinadas para el éxito de la acción --en su declaración policial sí había implicado a éste como autor intelectual de los hechos.
La sentencia aprecia inducción, instigación y autoría moral e intelectual en la conducta del etarra, que, bajo el manto de una organización jerarquizada y sometida al control de unos pocos sobre la mayoría, comete el delito dando instrucciones precisas para truncar el derecho a la vida. El acto "infortunadamente se materializó", lo que dicta la conducta de Olarra Guridi "de las voluntades criminales abstractas".
El "comando Erraia"
En julio de 1999, los dos etarras entraron en España e iniciaron una primera campaña que duró hasta finales de marzo del año 2000 y en la que recorrieron ciudades como Sevilla, Málaga o Granada, recopilando información sobre comisarías, cuarteles y otros edificios públicos, e hicieron seguimientos a empresarios, políticos, militares y periodistas.
En marzo de 2000, tras perder el contacto con la cúpula directiva de la organización terrorista, Solana e Iragui se trasladaron de nuevo a Francia, donde se reunieron con Olarra. El jefe de comandos les ordenó volver a España para llevar a cabo atentados contra las personas sobre las que habían recopilado información.
En concreto, les propuso atentar contra el concejal de Málaga José María Martín Carpena, contra el vicesecretario del PSOE en Andalucía José Asenjo Díaz y contra el fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de esa comunidad autónoma Luis Portero García. Olarra les entregó, entre otros materiales, cuatro kilos de explosivos y un millón de pesetas.
El asesinato de Muñoz Cariñanos
Después de asesinar a Portero, Martín Carpena y Asenjo Díaz, los dos etarras se asentaron en Sevilla. En octubre de 2000, Solana e Iragui asesinaron a tiros a Muñoz Cariñanos tras comprobar por teléfono que se encontraba en su consulta.
En su huida por las calles de Sevilla los etarras fueron interceptados por la policía. Tras un intenso tiroteo, los agentes detuvieron a Solana. Esa misma madrugada fue arrestado Iragui, quien había recibido un disparo en el brazo.
Además de los 34 años de prisión, el tribunal ha impuesto a Olarra Guridi la prohibición de volver a Sevilla. También deberá indemnizar con 901.518 euros a los herederos del médico asesinado.
El año pasado, la Audiencia Nacional absolvió por falta de pruebas al ex dirigente etarra Juan Antonio Olarra Guridi de haber participado en el asesinato en 1996 del ex presidente del Tribunal Constitucional Francisco Tomás y Valiente cuando integraba el "comando Madrid" de ETA.