'The Economist' cree que el "generoso" subsidio del paro en España potencia la economía sumergida
- Asegura que muchos parados en nuestro país evitan trabajar hasta agotar el subsidio
- En opinión de la revista británica, España tiene "alta tolerancia" ante el paro
La publicación británica The Economist asegura en su número de esta semana que las "generosas prestaciones" por desempleo de España han desencadenado una "fuerte y creciente" economía sumergida, ya que el mercado negro es "especialmente atractivo" para aquellos que aún reciben subsidios.
En opinión de esta revista conservadora, muchos parados en nuestro país son "reacios" a volver a trabajar hasta haber concluido el período de cobro de la prestación por desempleo. El artículo asegura que en 2009, la economía sumergida creció un 0,75 en España y recurre a un cálculo del sindicato de Técnicos de Hacienda (Gestha) que cifra la economía sumergida actual en el 23% del PIB.
Según The Economist, los partidarios del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, alegan que debe reconocerse el mérito del Ejecutivo al ampliar las prestaciones por desempleo, "aunque esto haya incrementado el déficit presupuestario y la economía sumergida".
"Alta tolerancia al paro"
La revista británica considera que las colas de las oficinas españolas de paro "nunca habían sido tan largas" y asegura que, por primera vez desde que el servicio militar fue abolido en 2001, la Ejército está a "su máxima capacidad" porque, según sus conclusiones, "coger un arma y arriesgarse en carreteras con bombas en Afganistán es una de las respuestas al problema al que se enfrentan los cuatro millones de españoles que están sin trabajo".
En opinión de esta publicación británica, España tiene una "alta tolerancia al desempleo". Asegura que "un sindicalista alertó hace tiempo de la posibilidad de que se produjera una revolución social" cuando se superaran los cuatro millones de parados, y se extraña de que cuando eso sucedió "no hubo amotinamientos", e "incluso las tasas de crímenes son relativamente bajas", añade el artículo.
The Economist señala también que nuestro país tiene el mercado laboral "más volátil" de Europa y ha destruído empleos "muy rápidamente", más incluso que Estados Unidos e Irlanda donde, según la revista, los despidos son relativamente baratos.
Destaca que Zapatero predijo hace 18 meses que el mercado de trabajo empezaría a recuperarse a finales de 2009 y que, desde entonces, "ha pospuesto la recuperación a finales de 2010". En esa misma línea, recuerda que el Banco de España ha pronosticado que la creación de empleo no comenzará hasta la segunda mitad de 2011, cuando la tasa de paro esté por encima del 20%.
La publicación afirma que un estudio de ese mismo organismo supervisor sugiere que en España existe un mercado laboral de dos niveles, que condena a un tercio de los trabajadores a un "carrusel de empleos inestables", mientras que el resto disfruta de "contratos blindados" y fijos. Para cambiarlo, según The Economist, el Banco de España pide "insistentemente" una reforma laboral.