Washington, tomada por la mayor reunión de líderes mundiales desde la fundación de la ONU
- Obama logra reunir a 46 líderes mundiales para hablar de desarme nuclear
- La reunión con el líder chino, básica para sacar adelante las sanciones a Irán
- Medvedev llena de elogios al líder estadounidense en una entrevista televisiva
Tal día como hoy hace 65 años, Franklin D. Roosevelt fallecía en los estertores de la II Guerra Mundial. Tan solo unas semanas antes, había reunido a un número sin precedentes de líderes mundiales para crear lo que hoy conocemos como Naciones Unidas.
Al igual que escogió Praga para realizar la firma del nuevo tratado de desarme nuclear para marcar la importancia de su propio discurso sobre un mundo libre de armas atómicas el año anterior, la cumbre nuclear que reúne al mayor número de líderes mundiales a convocatoria de un presidente de Estados Unidos debía celebrarse en esa fecha.
Tras evocar a Lincoln o a Reagan como referentes, Obama se pone el 'traje' del único presidente americano que ha estado cuatro mandatos en el cargo y lo hace justo cuando ha logrado recuperar el rumbo de su Presidencia tras aprobarse la reforma sanitaria y la firma del pacto nuclear.
Una ciudad tomada
Tal acumulación de líderes mundiales ha provocado que la capital de Estados Unidos haya amanecido tomada por un fuerte despliegue de seguridad, en la jornada inaugural de la cumbre.
Un despliegue de miles de policías y de agentes del Servicio Secreto, encargados de la protección presidencial, controlan el centro de Washington, donde se han instalado 6.100 metros de vallas a lo largo del perímetro de seguridad en torno al centro de convenciones de la ciudad, donde se celebra la cumbre.
Numerosas calles han sido cortadas y, aunque las agencias federales se encuentran hoy abiertas con normalidad, muchos funcionarios gubernamentales optaron por el teletrabajo o tomarse el día libre, siguiendo las recomendaciones de las autoridades, para evitar los grandes atascos que se esperan a lo largo de los dos días de reuniones.
La importancia china
Las comitivas presidenciales que les trasladan desde los aeropuertos y que circularán constantemente por todo Washington amenazan con empeorar los atascos. Helicópteros de las fuerzas de seguridad estadounidense y del servicio secreto sobrevuelan el espacio aéreo en torno al centro de convenciones.
Una de las comitivas más numerosas -e importantes- es la del presidente chino, Hu Jintao, cuyo encuentro cara a cara con Obama previo a la cena con la que se abre la cumbre marcará en buena medida su éxito o fracaso.
En él Obama tratará de conseguir el compromiso chino para aumentar la presión sobre Irán con nuevas sanciones por su programa nuclear, sanciones que deben aprobarse en el Consejo de Seguridad de la ONU, donde China tiene derecho de veto.
Por el momento, las señales que llegan del Gobierno chino son buenas. En general, el enviado a las conversaciones con el grupo 5+1 en Nueva York ha expresado su disgusto sobre posibles sanciones al sector energético iraní tras tres horas de reunión con los negociadores de Estados Unidos, Francia, Alemania, Reino Unido y Rusia.
Además, ambos líderes buscarán mejorar las relaciones bilaterales tras las tensiones desatadas en los últimos en una amplia gama de temas, desde la visita del Dalai Lama a la venta de armas a Taiwan, desde la salida de Google de China hasta el valor del yuan.
Otras importantes reuniones bilaterales del presidente estadounidense será las que mantenga con el rey de Jordania para hablar del proceso de paz de Oriente Medio -tras la ausencia de última hora del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu- y los encuentros con los dirigentes Ucrania, Malasia y Armenia.
El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, será uno de los asistentes y participará en la cena junto a Obama y los líderes mundiales.
Obama ya tiene el apoyo de Rusia a través de su presidente para ciertas sanciones contra Irán, después de la firma solemne en Praga del tratado de desarme nuclear.
Apoyo de Rusia
En una entrevista en el programa de la ABC Good Morning America, Medvedev ha mostrado su conformidad en vigilar de cerca al régimen iraní, aunque matizando que las sanciones deben ser inteligentes.
"No deberían llevar a una catástrofe humanitaria, en la que toda la comunidad iraní empiece a odiar a todo el mundo", ha subrayado.
Eso sí, Medvedev ha calificado que Obama es alguien muy preparado y "dispuesto a escuchar a su interlocutor".
"Se sumerge profundamente en los temas, así que sabe bien de lo que habla. No hay un solo ejemplo en nuestras reuniones en las que el señor Obama no estuviera preparado para las preguntas", ha declarado el presidente ruso, quien describió a su colega estadounidense como "simplemente, un hombre muy agradable con el que es un placer tratar".
Críticas de Irán
Mientras, desde Irán su presidente, Mahmud Ahmadineyad, ha lanzado un mensaje a los que asisten a la cumbre, a la que no ha sido invitado ni él ni el líder de Corea del Norte, King Jong-Il, verdaderos protagonistas 'en ausencia'.
"Las cumbres mundiales que se están organizando estos días buscan humillar a los seres humanos", ha declarado a los delegados de un evento de la industria turística local.
Por el momento, este domingo Obama ya dejaba claro que la agenda oficial de la cumbre -que algunos en su país han calificado de ingenua- es lograr "un enorme progreso" hacia el objetivo de controlar los materiales nucleares desperdigados por el mundo.
"Sabemos que organizaciones como Al Qaeda están progresando en sus intentos de lograr un arma nuclear, un arma de destrucción masiva que no tendrán perjuicios en usar", ha añadido.
Por el momento, en las calles de Washington no se mueve un alma sin el control de la Policía y los agentes federales para que la profecía de su presidente no se cumpla demasiado pronto.