De la Vega no cree que el uso del velo en España plantee un problema social
- Así lo ha asegurado la vicepresidenta tras el Consejo de Ministros
- Defiende las costumbres religiosas siempre que no afecte a la seguridad
- Cree que el caso de Pozuelo hay que resolverlo desde el diálogo
- Sobre la renovación del TC: "Requiere de la lealtad del PP"
La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, ha asegurado que defiende el uso de símbolos religiosos siempre que no atenten a los derechos fundamentales ni afecten a la seguridad y por tanto cree que el uso del velo no plantea ningún problema social en nuestro país.
Preguntada en la conferencia de prensa posterior al Consejo de Ministros sobre el caso de la niña de Pozuelo de Alarcón, apartada de las clases por el uso del velo islámico, ha dicho que se trata de un "problema puntual, que hay que resolver desde una posición conciliadora y desde el diálogo".
"No hay que plantear un problema donde no lo hay y no existe ningún problema de convivencia o de índole social", ha señalado, tras decir que el Gobierno trabaja en la redacción del anteproyecto de Ley Orgánica de Libertad Religiosa que pretende garantizar la igualdad de las diferentes confesiones y avanzar en el principio de laicidad.
La nueva Ley de Libertad religiosa, antes de verano
La número dos del Gobierno espera que la nueva ley sea una realidad antes de este verano y cree que la nueva norma se va a fundamentar en dos pilares: la libertad y la convivencia.
Considera, por otro lado, que es necesario adecuar una ley que tiene 30 años a la realidad social de la España actual.
De la Vega no ha querido concretar sobre la decisión que tomará el Gobierno en torno al uso de símbolos religiosos pero ha insistido en que se quiere avanzar hacia la laicidad, hacia la neutralidad en los público y el respeto a la libertad individual.
Sobre la renovación del TC: "Requiere de la lealtad del PP"
La vicepresidenta primera ha hablado también de la renovación del Tribunal Constitucional. Ha señalado que "claro que es necesario renovar el Constitucional pero para eso se necesita de la lealtad institucional del PP".
"Sin el compromiso y la responsabilidad del PP será muy difícil", ha dicho, tras señalar que "fue este Gobierno el que puso en marcha el mecanismo y el procedimiento para la renovación".
Ha dejado claro una vez más que los magistrados gozan de legitimidad porque así se la da la Constitución y la ley.
En los últimos días se ha generado una polémica tras la falta de acuerdo del Tribunal Constitucional en relación al quinto borrador sobre la sentencia del Estatuto de Cataluña que ha ocasionado duras críticas al tribunal.
Ante la petición por parte del tripartito catalán y de CiU de que el tribunal renueve sus magistrados (renovación pendiente desde hace más de dos años) el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha insistido en que este tribunal es legítimo para tomar una decisión sobre el texto estatutario de Cataluña.
En esta ocasión, PSOE y PP comparten opinión y no creen necesaria la renovación del tribunal antes de dictar esta sentencia, aunque este mismo jueves Rajoy ha acusado al presidente de ser el culpable de la situación por su "miopía".