El ICO eleva hasta el 30% su financiación del Plan Extraordinario de Infraestructuras

• Se rebaja así al 20% la aportación de constructoras y sector privado
• El Banco Europeo de Inversiones pondrá el 50% restante

El Instituto de Crédito Oficial (ICO) financiará hasta un 30% del Plan Extraordinario de  Infraestructuras de 17.000 millones de euros que el Ministerio de  Fomento quiere ejecutar en los dos próximos años en colaboración con el  capital privado. Ese porcentaje supone elevar la participación del 20% prevista en un principio,  según ha confirmado este miércoles la directora general de Negocio de esa institución  pública, Rosario Casero Echevarri.

La aportación de capital de constructoras y entidades  financieras privadas se reducirá así hasta el 20%, desde el 30%  inicial, dado que el Banco Europeo de Inversiones (BEI) respaldará  hasta un 50% del monto inversor del plan.

Un ICO accionista en infraestructuras

La participación del ICO en el Plan irá más allá de su habitual labor de concesión de financiación a las constructoras adjudicatarias de proyectos, ya que el organismo público entrará por primera vez como  accionista en esos proyectos.

Esa participación será indirecta, a  través del nuevo Fondo de Inversión en Infraestructuras previsto en la nueva Ley de Economía Sostenible,  que se quiere lanzar en verano. El ICO aportará  500 millones a ese fondo y los 500 millones restantes los captará entre  inversores internacionales.

Esta fórmula supondrá que el ICO, a través de su fondo, contará con una  participación "minoritaria y sin incidencia en la gestión" en la sociedad concesionaria que se adjudique la construcción y explotación de cada proyecto, según ha explicado la directiva del ICO durante su intervención en el V Encuentro de Infraestructuras organizado por Deloitte y  'ABC'.

Fondo público, gestión privada

Para decidir qué proyectos se ponen en marcha y a qué empresa o  empresas se adjudica, el Fondo de Inversión en Infraestructuras contará  con una sociedad de gestión privada, en la que el ICO participará de  forma minoritaria. Esa sociedad gestora evaluará los proyectos uno a  uno, dando prioridad a los sectores de transporte, energía y agua.

El  importe de cada proyecto financiado por el fondo deberá oscilar entre  los 10 y 100 millones de euros.

Este jueves está previsto que el ministro de Fomento, José Blanco, firme  con el ICO, el BEI, la Confederación Española de Cajas de Ahorro (CECA) y la Asociación Española de Banca la financiación de su Plan  Extraordinario, con el que se prevé adelantar obras de carreteras y  ferrocarriles sin que computen en el déficit del Estado.

Para ello, ese plan contempla que las constructoras, con el  respaldo de la banca pública y privada, adelanten la inversión para  realizar los proyectos y la recuperen cobrando un canon anual a la  Administración cuando la infraestructura en cuestión se ponga en marcha, a partir  de 2014.

Según indicó la directora general de Negocio, el ICO trabaja "para que el fondo esté disponible cuando arranque el Plan Extraordinario de Infraestructuras", aunque también podrá aplicarse a infraestructuras licitadas por las administraciones locales o autonómicas.

Cajas y bancos ofrecen liquidez, pero exigen más garantías

Además, en el encuentro sobre infraestructuras han participado varios representantes de  entidades financieras, que vinculan su contribución en la financiación de   infraestructuras a que el Gobierno "mejore las garantías" y solucione   los problemas y riesgos de quiebra que actualmente afrontan algunas   autopistas por haber asumido los riesgos de expropiación y de la   evolución del volumen de tráfico.

Según el subdirector general de La Caixa, Manuel Menéndez,  "hay liquidez suficiente para atender todas las necesidades" de financiación en el mercado de las infraestructuras, si bien "hace falta una mejora de las garantías".

"Hay que dar aire a la banca para que pueda apoyar las financiaciones", ha opinado Menéndez, por lo que solicita a los organismos licitantes que desatasquen "un entorno de incertidumbre que afecta al sector financiero".

"El talante de los bancos dependerá a la solución que se dé a las  actuales concesiones", ha indicado el subdirector general del Santander,  Mariano Olmeda, quien ha llamado la atención sobre los "brutales sobrecostes por  expropiación de terrenos" para la construcción de autopistas. Ante esa situación, Olmedo cree que las fórmulas de colaboración público-privadas puede ser  una solución a la falta de liquidez, aunque "la estructura de deuda  complica el problema".

Asimismo, Olmeda ha señalado que las proyecciones de volumen de  tráfico utilizadas para valorar las concesiones de autopistas son "un  drama", porque el "caso real" suele estar muy por debajo del "caso  base".

Mientras, el director ejecutivo de financiación de infraestructuras del BBVA, Carlos Fernández Almazán, ha pronosticado que los futuros protagonistas del mercado de la financiación serán los clientes industriales y los fondos de infraestructuras, las Administraciones Públicas, los organismos multilaterales como el BEI, las entidades financieras y el mercado de capitales.