Los sindicatos griegos rechazan el plan de ajuste en las marchas por el Primero de Mayo
- Este sábado se celebra el Día Internacional del Trabajo
- Catorce heridos y tres detenidos en los desórdenes en Hamburgo
- Miles de asiáticos reclaman en las calles mejores condiciones laborales
La policía griega ha disparado este sábado gases lacrimógenos en el centro de Atenas y Salónica, la segunda ciudad helena, para dispersar a grupúsculos de manifestantes violentos, informaron las fuerzas de seguridad.
En Atenas, donde hasta 20.000 personas salieron a las calles para protestar contra los duros planes de austeridad del Ejecutivo, los agentes han intervenido ante el Parlamento contra un reducido grupo de manifestantes violentos al final de una marcha multitudinaria y pacífica, con motivo del Día del Trabajo.
Según la emisora Skai, el ex presidente del Parlamento, Apóstolos Kaklamanis, fue objeto durante la jornada de un intento de agresión, sin que resultara herido.
En Salónica, los agentes intervinieron cuando un grupo de alrededor de 300 jóvenes destrozaron varios cajeros automáticos, las cristaleras de varias oficinas bancarias y algunos vehículos durante las movilizaciones con motivo del Primero de Mayo.
Los jóvenes se dispersaron tras la intervención policial sin que se detuviera a ninguno de los implicados ni se registraran más incidentes.
Los sindicatos griegos habían llamado a la ciudadanía a mostrar su descontento -durante las movilizaciones del Día del Trabajo- por el severo plan de austeridad del Gobierno para sanear la economía del país.
En toda la jornada el transporte ferroviario y marítimo estará paralizado hasta las 06.00 horas del domingo, al igual que los trenes de cercanías que llevan al aeropuerto.
Centenares de agrupaciones laborales han anunciado su participación en las manifestaciones convocadas para esta jornada. Los sindicatos declaran en un comunicado que "la manifestación de hoy tiene un significado especial debido a las medidas severas e injustas por parte del Gobierno".
Alemania, 14 heridos y 250 detenidos
Catorce personas resultaron heridas y tres fueron detenidas en los enfrentamientos registrados en la ciudad de Hamburgo, entre la policía y los militantes radicales.
Los desórdenes se produjeron anoche, en los habituales actos previos al 1 de mayo que muchas veces han sido vistos como el primer acto de una serie de disturbios, que suelen tener como escenarios a Berlín y Hamburgo.
Según la policía, cerca de 150 manifestantes de radicales prendieron fuego a mobiliario, tablas de madera y restos de basura en la calle y luego lanzaron piedras y botellas a los agentes.
En Berlín, unos 250 neonazis han sido detenidos cuando pretendían realizar una marcha con ocasión del Primero de Mayo, mientras decenas de miles de manifestantes de izquierda bloqueaban diferentes movilizaciones ultraderechistas convocadas tanto en la capital como en otras ciudades alemanas.
El poderoso contingente policial dispuesto para la jornada -unos 7.000 agentes sólo en Berlín- detuvo a prácticamente la totalidad de los 300 neonazis que intentaban desfilar por un barrio del oeste, para zafarse de las acciones de bloqueo que salpicaron el recorrido inicialmente previsto en el este de la ciudad.
La manifestación neonazi había sido convocada por el ultraderechista Partido Nacional Democrático (NPD) y debía discurrir por Prenzlauerberg, en el este, donde miles de ciudadanos se apostaron en las calles, puentes y tejados para salirles al paso.
El empleo, las pensiones, la protección social y la reforma del sistema financiero centrarán las reivindicaciones que este sábado han convocado en toda España los sindicatos con motivo del Día Internacional del Trabajo.
Miles de asiáticos reclaman mejores condiciones laborales
Varios miles de trabajadores de países del sudeste de Asia, desde la superpoblada Indonesia a la empobrecida Camboya, han salido a las calles para pedir mejores condiciones laborales.
Al menos 30.000 personas ocuparon la mayor avenida de Yakarta, la capital de Indonesia, con la finalidad de reivindicar sus derechos a la prestación social, mejor remuneración, y cobertura medica, para así equiparse con los funcionarios de la Administración
En Malasia, la policía de Kuala Lumpur impidió la manifestación, secundada por unas 300 personas, de las que detuvo a tres por exhibir pancartas en las que denunciaban las condiciones laborales y exigían mejoras salariales.
En Singapur, el país más desarrollado del sudeste de Asia, su primer ministro, Lee Hsien Long, anunció que en 2010 el Gobierno creará más de 100.000 nuevos puestos de trabajo, la mayoría para nacionales, si la economía crece al menos un 7%.
En Camboya, uno de las naciones más pobres de la región, varios miles de trabajadores marcharon por las calles de Phnom Penh, la capital, para pedir mejores condiciones de trabajo y la creación de un tribunal competente en materia laboral.
El grueso de la manifestación, estuvo formado por trabajadores de la industria textil, a la que va destinada la mayor parte de la inversión extranjera en Camboya.