Los presidentes suramericanos amenazan con boicotear la cumbre de Madrid si asiste Honduras
- El ecuatoriano Correa protesta porque se invite a un gobierno "ilegítimo"
- La presidencia española acoge este mes la reunión UE-Latinoamérica
La cumbre extraordinaria de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) ha terminado con una amenaza de plantón a la cumbre UE-América Latina prevista este mes en Madrid si se mantiene la invitación al presidente hondureño, Porfirio Lobo.
Tras un denso debate sobre la situación en Honduras, que acaparó buena parte de la reunión, el presidente de Ecuador, Rafael Correa, ha anunciado que transmitirá su queja al presidente del Gobierno español, que ejerce la presidencia de turno de los Veintisiete.
"De asistir el Gobierno de Honduras nosotros no podríamos asistir a esta cumbre ya que no lo consideramos un gobierno legítimo", ha afirmado Correa.
“La invitación a Lobo ha creado mucho malestar en la región“
La invitación a Lobo a la cumbre convocada para los días 17 y 18 de mayo "ha creado mucho malestar en la región y me han encomendado, en mi condición de presidente pro témpore, hablar con nuestro amigo José Luis Rodríguez Zapatero, en los términos más comedidos".
"Se ha cometido una ligereza al invitarlo sin consultar a los gobiernos de la región" porque "no se puede minimizar la ruptura institucional de Honduras", ha añadido.
“No se puede minimizar la ruptura institucional de Honduras“
"Todos queremos ir, pero no vamos a claudicar", ha advertido evitando mencionar los países que podrían sumarse al plantón en la cita de Madrid.
Sólo Colombia y Perú han reconocido el triunfo de Lobo en las elecciones organizadas en noviembre por el Gobierno de facto de Roberto Micheletti tras el golpe de Estado del pasado junio contra el presidente Manuel Zelaya.
Problema diplomático
La decisión de Unasur supone un jarro de agua fría para el gobierno de Zapatero, que pretendía exhibir la cita de mayo como un logro antes de concluir su semestre como presidente en turno de la Unión Europea.
Lobo ha confirmado ya su presencia en la cumbre de Madrid, por invitación de Zapatero y el embajador español en Honduras, Ignacio Rupérez, afirmaba este mismo martes que las relaciones entre Madrid y Tegucigalpa son "perfectamente normales, positivas y progresivas".
Fuentes diplomáticas dan por descontado que el colombiano Álvaro Uribe y el peruano Alan García --los dos grandes ausentes de esta cumbre de Unasur-- asistirán a Madrid, y dan por seguras las ausencias del venezolano Hugo Chávez y el ecuatoriano Rafael Correa, salvo que se encuentre una salida que pueda satisfacer a todas las partes en conflicto.
Una alternativa en la que podría estar trabajando el brasileño Luiz Inacio Lula da Silva, que durante la reunión ha propuesto pedir a Honduras que permita el regreso de Manuel Zelaya con plenos derechos civiles.
La polémica sobre Honduras eclipsó el otro tema estrella de la cumbre, la elección, por unanimidad, del ex presidente argentino Néstor Kirchner como primer secretario general de Unasur.