¿Y si sobrevive Gordon Brown?

• Dos sondeos colocan ya a los laboristas en segunda posición
• Los candidatos luchan cada voto en la última jornada de campaña
• El 'premier' corrije a dos ministros y rechaza el voto táctico

Gordon Brown: ¿el perdedor de las elecciones?

El primer ministro británico, Gordon Brown, ha recibido un impulso de última hora en las encuestas cuando encara el último día de campaña electoral antes de las elecciones del jueves mientras podría apagarse poco a poco la estrella de los liberal-demócratas, que aparecen ya en tercer lugar tras estar por delante de los laboristas en las últimas dos semanas.

La encuesta diaria de la empresa Yougov para el Sun muestra una caída de cuatro puntos del partido de Nick Clegg hasta el 24%, aprovechada por los laboristas, que suben dos hasta el 30%, aunque aún lejos del 35% de los conservadores.

Sin embargo, como señala la corresponsal de TVE en Londres, Anna Bosch, más votos pueden traer menos escaños. Según la proyección de la BBC, con estos resultados los laboristas serían la fuerza con más escaños en la Cámara de los Comunes.

Mientras, otra encuesta de ComRes para la cadena de televisión ITV y el diario The Independent coloca a los conservadores en un 37% frente al 29% de los laboristas y el 26% de los liberales.

Con esta encuesta, el líder conservador, David Cameron, tendría más diputados, pero no lograría una mayoría suficiente para gobernar y estaría a expensas de un posible pacto entre laboristas y liberales en un 'parlamento colgado', su gran pesadilla

"Esto luchando por ganar", ha declarado Brown a la emisora de radio de la BBC, asegurando que está haciendo campaña por lograr la mayoría tras la petición de dos de sus ministros -el de Educación y el de Gales- de que se hiciese un voto táctico, es decir, que los votantes laboristas llegasen a dar su apoyo a los liberales en aquellas circunscripciones donde su candidato no tuviese posibilidades.

Abandono del tacticismo

Sea casualidad o no, en una entrevista con el Times,  el propio Brown ha desechado esa opción: "Estoy pidiendo a la gente que vote a los laboristas porque quiero lograr el máximo voto para el Laborismo".

Su predecesor en el cargo, Tony Blair ha declarado al Guardian en la misma línea que los votantes deben votar "en lo que creen". "Si cree que las políticas de los candidatos son buenas, vota por ellos, si no, no", ha añadido.

Blair ha aprovechado también para críticar a los liberal-demócratas, al igual que otros altos cargos laboristas, que ven que en estos últimos días han 'tocado hueso' con el voto útil.

"A la gente le gustó lo que vió en Nick Clegg hace tres semanas -en referencia al primer debate- y desde entonces el ha estado un poco irritante, ha estado intentado los mismos trucos en cada debate televisivo y ya cansa un poco", ha declarado Alan Johnson, el ministro de Interior laborista.

Mientras tanto, los tres candidatos han entrado en la recta final de la campaña y ponen toda la carne en el asador.

"Éstas son las elecciones más importantes en una generación y no quiero despediciar ninguna hora en el último día para salir fuera y persuadir a la gente de que necesitamos un cambio", ha declarado Cameron a la cadena GMTV.

"Soy un luchador y no me rindo", ha insistido Brown, que pese al alivio de las encuestas ha tenido que soportar el último capítulo de la desbandada de apoyos mediáticos.

Medios a la fuga

Dos importantes tabloides, el Daily Express y el Daily Mail, han dado su apoyo a los conservadores, siguiendo la línea marcada por el mayor de ellos, el Sun.

Por su parte, el progresista The Independent ha pedido el voto para los liberal-demócratas, como antes hizo el Guardian, al considerar necesaria una reforma electoral. Eso sí, en los lugares en los que la lucha está entre conservadores y laborista, pide el voto para los laboristas.

Así las cosas, ya se está pensando incluso en el día después de las elecciones.

Los liberal-demócratas, los más cortejados para los posibles pactos, han insistido en que están "deseando" hablar con otros partidos, pero siempre teniendo en cuenta lo que la gente vote, según ha declarado su portavoz de Economía, Vince Cable.

Por su parte, los unionistas de Irlanda del Norte, que podrían ganar al menos nueve escaños, han asegurado que están encantados de formar coalición con los conservadores si juntos pueden lograr una mayoría.