Los países del euro se conjuran para defender su divisa y preparan un mecanismo permanente
- Usarán "todos los instrumentos a su alcance" para defender el euro
- La reunión de los líderes de la Eurozona ha durado casi cuatro horas
- El documento acordado se examinará este domingo en la reunión extraordinaria de los ministros de Economía
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Unidad sin fisuras. Eso es lo que han querido transmitir los 16 países miembros del euro y las instituciones europeas de cara a los mercados financieros para evitar ataques como los vividos en las últimas semanas contra los países considerados más débiles dentro de la Zona euro, como España, Portugal y, desde este viernes, también Italia.
En esa línea, los gobiernos participantes en el Eurogrupo han acordado la puesta en marcha inmediata de un mecanismo de estabilización financiera que haga uso de "todos los medios" a disposición de las instituciones comunitarias y de los Estados miembros, según ha explicado el presidente permanente de la Unión Europea, Herman Van Rompuy.
Los Dieciséis han encargado a la Comisión Europea que proponga los detalles de ese mecanismo, habida cuenta de las "circunstancias excepcionales" que afectan a la estabilidad de la zona, como ha señalado el presidente del Ejecutivo comunitario, José manuel Durao Barroso.
Ese documento se examinará el próximo domingo en una reunión extraordinaria de los ministros de Economías y Finanzas de la Eurozona que organizará la Presidencia española.
Todas las instituciones comunitarias -la Comisión de la UE, el Consejo Europeo y el Banco Central Europeo-, así como todos los Estados miembros de la Zona euro, han acordado "utilizar todos los medios disponibles para asegurar la estabilidad de la zona", según reza la declaración respaldada esta madrugada por los miembros del Eurogrupo.
Los líderes también han aprobado este viernes definitivamente la activación del mecanismo de ayuda financiera a Grecia, por el cual concederán a Atenas préstamos por valos de 80.000 millones de euros en los próximos tres años, un paquete que se completará con otros 30.000 millones de euros del Fondo Monetario Internacional.
Una discusión de casi cuatro horas
En una maratoniana reunión que se ha prolongada cerca de cuatro horas, los jefes de Estado y de Gobierno del Eurogrupo han tratado de aúnar posiciones para dar una imagen de unidad suficientemente convincente como para frenar los ataques especulativos contra la Zona euro.
Las discusiones se han centrado en adoptar medidas para aumentar el control de los mercados financieros y evitar así los movimientos especulativos que, según los líderes de los 16, están atacando la Zona euro.
Según algunas fuentes diplomáticas, los mayores debates se han centrado en la creación de ese mecanismo permanente que pretendería garantizar "intervenciones multilaterales en defensa del euro", es decir, una especie de fondo de apoyo que permitiera actuar con rapidez en caso de ataques contra la divisa europea.
También, según esas mismas fuentes, se habría estudiando la posibilidad de una mayor intervención del Banco Central Europeo (BCE), para lo que se manejan varias opciones. Una de ellas sería la compra de deuda emitida por los Estados para proporcionarles así liquidez. El pasado jueves, el presidente del BCE aseguró que el organismo no había abordado esa posibilidad.
Múltiples contactos multilaterales
La reunión extraordinaria de los líderes de la Eurozona ha comenzado a las 21:00 horas, con dos horas de retraso sobre el horario previsto, debido a la celebración de varias reuniones bilaterales previas para afinar los detalles de este mecanismo, y después de otra jornada negra en los mercados de valores y en un ambiente de creciente preocupación.
Así, el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, se ha entrevistado con el presidente francés, Nicolas Sarkozy, con el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, con el portugués, José Sócrates, y con el presidente permanente del Consejo Europeo, el belga Herman Van Rompuy. También ha hablado telefónicamente con el todavía primer ministro británico, Gordon Brown, para perfilar la participación de Reino Unido en este plan.
Por su parte, Sarkozy ha multiplicado sus contactos bilaterales y se ha reunido con Berlusconi y Sócrates, así como con la canciller alemana, Angela Merkel, quien se ha mostrado como la más reticente al rescate de Grecia y a que se generalice este tipo de mecanismo de asistencia.
A la entrada del encuentro con Sarkozy, Merkel ha reiterado que es necesario reforzar el Pacto de Estabilidad y Crecimiento, incluso reformando los Tratados si es necesario, para evitar que en el futuro otros países puedan saltarse los límites de déficit y deuda como hizo Grecia.