Los bancos centrales de la eurozona comienzan a comprar deuda pública para estabilizar el euro
- La Fed y el BCE reactivan sus permutas de divisas para asegurar la liquidez
- La autoridad monetaria niega presiones políticas, aunque admite que hay riesgos
Los bancos centrales de la zona euro han comenzado a comprar deuda pública para respaldar a los países más presionados por los mercados y estabilizar el euro, en aplicación del acuerdo alcanzado por Consejo de Ministros de Economía y Financias de la UE (Ecofin) esta madrugada.
"Todos los bancos centrales del eurosistema se implicarán en las adquisiciones", ha señalado un portavoz del banco central de Finlandia, que ha sido el primero junto al Bundesbank alemán en comprar bonos soberanos. Posteriormente, el propio presidente del Banco Central Europeo, Jean Calude Trichet, ha confirmado las compras, que se centrarán en los países con más dificultades, esto es, Grecia, Portugal, Irlanda, España e Italia.
El Banco Central Europeo, que hasta ahora se había resistido a que el eurosistema adquiriese deuda pública -un paso que compromete su independencia- ha emitido este lunes un comunicado en el que justifica la decisión en el compromiso adquirido por los Estados que utilizan la moneda única para reducir el déficit y acelerar la aplicación de sus programas de consolidación fiscal.
Un riesgo controlado
La compra de deuda pública por parte de la autoridad monetaria -denominada "señoreaje"- equivale a inyectar liquidez en el sistema monetario, pero eleva la inflación, por lo que el compromiso es que los Estados no se endeuden aún más y pongan en riesgo la estabilidad de precios. En cualquier caso, es un mensaje claro contra los especuladores, lo que algunos analistas denominan el botón nuclear de la política monetaria.
Con todo, Jean-Claude Trichet se ha visto obligado a negar que la entidad monetaria haya tenido presiones políticas al decidir la compra de deuda pública y privada en los mercados. En ese sentido, tras una reunión en la sede del Banco de Pagos Internacionales (PBI) en Basilea (Suiza), ha hecho hincapié en que "somos completamente independientes", insistiendo en que fue "una decisión del consejo de gobierno del BCE y no el resultado de presión política".
Eso no ha evitado que el presidente del Bundesbank y vicepresidente del BCE, Axel Weber -considerado el sucesor de Trichet el año próximo-, haya advertido de que el plan de compra de bonos, aún siendo apropiado, implica "riesgos considerables". "Ahora se trata de contener esos riesgos todo lo posible, es por eso que las compras estarán estrcitamente limitadas", comenta en una entrevista.
Baja el coste de la deuda
En cualquier caso, la medida ya está aliviando la presión sobre el coste de la deuda de países como Grecia y España. En concreto, el diferencial entre el bono español y el alemán, el de referencia en Europa, sigue bajando y se sitúa por debajo de los 100 puntos básicos, en concreto, en los 0,973 puntos porcentuales, frente a los 140 básicos de la apertura de este lunes.
Según los datos de mercado, la rentabilidad de los bonos españoles a 10 años se situaba en el 3,933% y la de los de Alemania en el 2,960%. El pasado viernes, el diferencial entre el bono español y el alemán se situó en los 164 puntos básicos.
Por su parte, el diferencial entre el bono alemán y el griego se redujeses desde los 768 puntos básicos de la apertura de hoy (946 el viernes) hasta los 443 puntos del mediodía.
Acción conjunta de los bancos centrales de las potencias
La compra de bonos se completará, según el acuerdo alcanzado esta madrugada, con una acción conjunta de los principales bancos centrales del mundo para respaldar la estabilidad del euro. Así, el BCE y la Reserva Federal de Estados Unidos han reabierto el mecanismo de préstamos de emergencia o líneas swap de intercambio de divisas para proporcionar liquidez en dólares al mercado, junto al Banco de Inglaterra (BoE), el Banco Nacional de Suiza (BNS) y el Banco de Japón, tal y como sucediera en 2007 y 2008.
"En respuesta a la reemergencia de tensiones en la financiación en dólares a corto plazo en Europa, el Banco de Canadá, el Banco de Inglaterra, el Banco Central Europeo, la Reserva Federal y el Banco Nacional de Suiza han reestablecido las facilidades temporales de intercambio de liquidez en dólares diseñadas para mejorar las condiciones de liquidez en dólares en los mercados de financiación y evitar el contagio de las tensiones a otros mercados y centros financieros", ha explicado la Fed en un comunicado.
Por su parte, el BCE ha precisado que las operaciones de adjudicación de liquidez en dólares se celebrarán a tipo fijo y sin límite en la cantidad adjudicada. En concreto, la institución presidida por Jean Claude Trichet celebrará operaciones semanales a partir de mañana, mientras que el próximo 18 de mayo llevará a cabo una operación con vencimiento a 84 días.