Madres solteras por voluntad propia
- Cada vez más solteras acuden a un centro de reproducción asistida
- A partir de los 37 años se reducen las posibilidades de ser madre
El reloj biológico avanza y no quieren supeditar su ilusión de ser madres a encontrar pareja.
Son mujeres sanas que deciden acudir a un banco de semen.
En el laboratorio pueden elegir los rasgos físicos del donante, nunca el sexo. La altura, el color de la piel o los ojos para que se parezca lo más posible a la madre.
Con todas las garantías
Podrían buscar una relación esporádica o pedirselo a un amigo pero no quieren poner cara al padre.
En una clínica les garantizan, además, que el donante es un hombre completamente sano que ha pasado unos rigurosos controles médicos y psicológicos.
Si en algún momento el niño tiene algún problema se pueden buscar los antecedentes médicos del padre incluso pedirle que se haga una prueba en beneficio de su hijo.
Una ley muy flexible
Nuestro país permite a cualquier mujer mayor de edad acceder a un banco de semen.
Por eso vienen mujeres de muchos países europeos que prohiben la donación de gametos o no garantizan el anonimato de los donantes.