Más de seis millones de dominicanos eligen este domingo a legisladores y alcaldes
- La alianza que encabeza el oficialista PLD, se perfila como favorita
- El período de elección se extenderá extraordinariamente hasta los seis años
Más de 6,1 millones de dominicanos podrán ejercer este domingo el sufragio en las elecciones legislativas y municipales que pondrán en juego 4.036 cargos y en las que, según varios sondeos, la alianza que encabeza el oficialista Partido de la Liberación Dominicana (PLD), se perfila como favorita.
Los comicios renovarán el Congreso Nacional (bicameral), las alcaldías y distritos municipales y, por primera vez, el voto popular elegirá a los 20 candidatos locales al Parlamento Centroamericano (Parlacen) y a los cinco diputados nacionales, una figura que debuta en el panorama político nacional y que fue incluida en la nueva Constitución promulgada el pasado 26 de enero.
En esta oportunidad, el período de elección se extenderá de manera extraordinaria hasta los seis años, en vez de los cuatro tradicionales, atendiendo a un artículo transitorio de la reforma constitucional, con el propósito de que las próximas elecciones legislativas y municipales se celebren en 2016 al igual que la votación presidencial.
La campaña electoral, que concluyó este viernes con la muerte de dos personas en enfrentamientos políticos, ha tenido un coste de unos 84 millones de dólares, según datos ofrecidos por la Junta Central Electoral (JCE).
Un grupo de más de 70 observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA) y de otros organismos y formaciones partidarias internacionales está en el país para supervisar la convocatoria y sus resultados.
El PLD se perfila como favorito
El PLD, encabezado por el presidente dominicano, Leonel Fernández, se vislumbra como el ganador de las elecciones, según varias encuestas, aunque su principal rival, el Partido Revolucionario Dominicano (PRD), asegura que sus candidatos se impondrán en al menos 15 de las 32 provincias del país.
El oficialismo espera superar sus 22 escaños en el Senado, los 96 de la cámara de diputados y la mayoría de las alcaldías, por sólo cuatro del PRD en la cámara alta y 60 diputaciones.
El favoritismo del partido gubernamental es apuntalado por su alianza con más de diez organizaciones como el Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), que aunque disminuido a una organización minoritaria, obtuvo en los comicios de 2006 cuatro puestos en el Senado y 22 en la Cámara de Diputados.
La tónica de la etapa previa a las elecciones ha estado marcada por las constantes acusaciones del PRD sobre el "uso y abuso" de los recursos del Estado en favor de los candidatos del PLD y sus aliados, quienes han respondido señalando que las denuncias responden a la "desesperación" de sus opositores.
Una economía centrada en el turismo
Esta nación de diez millones de habitantes, ubicada en el centro del archipiélago caribeño, basa su economía en el turismo, las remesas de sus residentes en EE.UU. y Europa, así como en la producción de las zonas francas de exportación.
De acuerdo a datos oficiales locales, el desempleo en el país es de un 15,1%, mientras que la Comisión Económica para América Latina, sitúa la esperanza de vida al nacer en 72,2 años y el índice de mortalidad infantil es de 29,6 por cada 1.000 nacimientos.
El Banco Central informó hace dos semanas de que la economía local creció un 7,5% en el primer trimestre y cifró en 2,69% la inflación en los primeros cuatro meses del año.
Con ese tipo de datos, el oficialismo cree que contará de nuevo con el favor de los electores, aunque la oposición apuesta a un "cambio de rumbo", como lo expresa el presidente del PRD, Miguel Vargas, al denunciar el aumento "del narcotráfico, el lavadode activos, el costo de la vida, la delincuencia y la corrupción administrativa".
El resultado de las votaciones podría resultar crucial para las aspiraciones del propio Vargas, un ex candidato presidencial que busca alcanzar el poder en las elecciones generales de 2012, pero quien ha sostenido enfrentamientos con altos dirigentes de su partido, incluyendo al ex presidente dominicano, Hipólito Mejía (2000-2004), de quien fue su ministro de Obras Públicas.