EE.UU. acoge con cautela la oferta nuclear de Irán
- La Casa Blanca considera vaga la oferta iraní para transferir el uranio a Turquía
- Insiste en que el programa de enriquecimiento viola las resoluciones de la ONU
Compás de espera, cautela, recelo y más detalles. La Casa Blanca considera positivo el acuerdo iraní de transferir parte de su uranio para que sea enriquecido en Turquía. Al fin y al cabo, ese era el núcleo de la oferta que hicieron las potencias en octubre.
Sin embargo, persisten las dudas. Azuzadas fundamentalmente por la insistencia de Teherán de seguir enriqueciendo el combustible nuclear en su propio territorio. Amén de que la transferencia de uranio es menor incluso de la que fijaba la oferta inicial.
Persiste la preocupación
Así las cosas, Washington espera conocer más detalles sobre el acuerdo auspiciado por el presidente brasileño, Lula da Silva. Y entretanto, insiste en que las potencias siguen seriamente preocupadas por el programa nuclear iraní. Sospechan que el enriquecimiento de uranio es con fines militares.
"Irán debe dar los pasos necesarios para asegurar a la comunidad internacional que su programa nuclear sólo tiene propósitos pacíficos", ha señalado el portavoz de la Casa Blanca, Robert Gibbs.
En otros términos, la oferta de Teherán no paraliza las sanciones. De momento. Estados Unidos seguirá trabajando con sus socios para dejar claro a Irán que debe cumplir sus compromisos o afrontar las consecuencias. Las sanciones. Y de postre, esperará a que la AIEA reciba el acuerdo iraní antes de que sea considerado por la comunidad internacional.
Naciones Unidas pide más
En este sentido, Naciones Unidas considera "alentador" el intercambio de uranio acordado por Irán, Brasil y Turquía, según ha señalado Martin Nesirky, portavoz del secretario general, Ban Ki-moon.
El pero que pone la organización es viejo: cumplir las cinco resoluciones del Consejo de Seguridad, que exigen a Teherán que suspenda su programa de enriquecimiento. Algo que el acuerdo de este lunes no despeja.