La crisis financiera de MGM lleva a Guillermo del Toro a dejar el proyecto de 'El hobbit'
- Lo hace, muy a su pesar, por los retrasos constantes en el proyecto
- No obstante, mantiene su compromiso como coguionista en los dos filmes
El mexicano Guillermo del Toro ha abandonado su cargo como director de El hobbit debido a los constantes retrasos en el rodaje, provocados por los problemas financieros de la productora Metro Goldwyn Mayer (MGM).
Así lo anunció hoy el propio cineasta a través de un comunicado publicado en el portal de internet The One Ring, especializado en la popular saga de El Señor de los Anillos, en el que admitió que ésta es "la decisión más dura" de su vida.
"A la luz de los constantes retrasos en la fecha de inicio del rodaje de El hobbit, debo afrontar la decisión más dura de mi vida", escribió el realizador, de 45 años, sobre este proyecto que, en principio, iba a ver la luz en dos películas, que se estrenarían en diciembre de 2012 y diciembre de 2013.
"Después de dos años de vivir, respirar y diseñar un mundo tan rico como la Tierra Media de Tolkien, debo, con gran pesar, abandonar la tarea de dirigir estas maravillosas películas", afirmó del Toro.
El cineasta especificó que continuará desarrollando los guiones de ambas cintas junto a Peter Jackson, Fran Walsh y Phillippa Boyens.
Días atrás, el mexicano había mostrado su pesadumbre por la situación en la que se encuentra El hobbit, proyecto por el que se mudó con su familia a Nueva Zelanda hace más de un año.
Un agujero de 3.700 millones
Metro Goldwyn Mayer se encuentra en una situación crítica, con una deuda de 3.700 millones de dólares y sometida al control de una serie de fondos de capital riesgo que quieren mantener el estudio a flote reduciendo costes.
"Como coguionista y director de las películas, deseo a la producción la mejor de las suertes y seré el primero en la cola para ver el producto finalizado", concluyó del Toro.
Las dos películas de El hobbit se centran en la novela homónima de Tolkien, que precede a El Señor de los anillos y cuyo protagonismo recae en Bilbo Bolsón, papel que en la saga de Peter Jackson interpretó Ian Holm.
Las tres cintas de El Señor de los anillos generaron 3.000 millones de dólares en taquilla entre 2001 y 2003. La tercera parte, además, se hizo con los 11 premios Oscar a los que aspiraba.