El Prado reúne "Los amores de Mercurio y Herse", la mejor serie de tapices
- Es la primera exposición dedicada a los tapices en el Prado
- La serie de telas está considerada la mejor del siglo XVI
El Museo del Prado ha reunido una de las series más espectaculares de la historia de la tapicería, "Los amores de Mercurio y Herse", formada por ocho tapices tejidos en los telares de Willem de Pannemaker que se exhiben en la primera exposición que la pinacoteca dedica a estas telas.
Con hilos de oro y seda, la serie narra la historia inspirada en los versos de Ovidio sobre los amores del dios Mercurio, hijo y mensajero de Júpiter, con Herse, hija del rey de Ática.
Dos de las telas de esta serie -considerada como la mejor del siglo XVI- pertenecen al Museo del Prado, que nunca antes las había exhibido, mientras que otras dos han sido prestadas por el Metropolitan de Nueva York y el resto por tres colecciones privadas españolas.
"Es la primera vez que se ve la serie completa"
"Se trata de la primera vez que el público puede ver la serie completa. Es una de las más espléndidas y menos conocida, realizada por Willem de Pannemaker, tapicero de las principales casas reales y en especial de Carlos V y Felipe II", recordó Gabriele Finaldi, director adjunto del Museo.
En su opinión, se trata de una serie espléndida por su tamaño, su calidad, su diseño, el oro y la plata, así como la gran riqueza de sus fondos, "que hacen de cada tapiz todo un mundo".
Con esta primera exposición sobre tapices que se celebra en el Prado, el museo ha querido ensalzar dos de sus obras maestras "reuniendo a los ocho hermanos que se disgregaron", señaló Letizia Azcue, jefe de conservación de Escultura y Artes Decorativas de la pinacoteca.
Una de las series más espectaculares de la historia de la tapiceria
"En estos momentos, en todo el mundo se están poniendo en valor los tapices, objetos de lujo por excelencia que valían más que los ticianos, eran las piezas que más costaban de las colecciones", indicó.
Para hacer la serie que se muestra en el Prado era necesario un gran pintor, que diseñará los cartones, de 4x6 metros cuadrados aproximadamente cada uno, y los tejedores. "Según los estudios que hemos hecho, una persona podía tejer medio metro al mes de una tela de esta categoría, por lo que ocho personas hubieran tardado 4 años en realizar las ocho telas", agregó Azcue.
La conservadora destacó que la serie, en la que se utilizaron 20 kilos de hilo de plata dorada, "es una de las más espectaculares de la historia de la tapicería y, por su puesto, única en Europa".
Los tapices son "El antecedente del cine"
Concha Herrero Carretero, conservadora de Tapices de Patrimonio Nacional y comisaria de la exposición, consideró las series de tapices como "el antecedente del cine", porque, dijo, "se trata de secuencias escénicas que van relatando una historia".
La serie estaba intacta en su número pero no en su estado de conservación, por lo que, indicó la comisaria, se han realzado algunas intervenciones "que han demostrado que son paños riquísimos en colorido y los más vistosos que ahora se conservan".
Las investigaciones llevadas a cabo durante el último año y medio sitúan al Duque de Lerma y valido de Felipe III como su primer propietario.
La exposición incluye en su recorrido el retrato del Duque pintado por Rubens, así como unas estampas de Giovanni Volpato de las logias vaticanas que se consideran fuente iconográfica de las cenefas de los tapices.
Se podrán ver hasta el 26 de septiembre
También los últimos estudios sitúan al autor de los cartones en el círculo de Rafael "y, aunque no tenemos todavía la seguridad, pensamos que podrían haber sido pintados por Giovanni Battista Lodi, dibujante y cartonista activo en Bruselas", apuntó la comisaria.
Willem de Pannemaker, activo desde 1535 hasta 1581 y miembro de una de las más afamadas familias de tejedores asentadas en Bruselas, fue el gran tapicero del Renacimiento flamenco. "Todas sus obras pueden considerarse obras maestras", según la comisaria.
La exposición permanecerá abierta hasta el próximo 26 de septiembre y cuando finalice, y tras el acuerdo firmado entre el Museo del Prado y la Fundación Casa Ducal de Medinaceli, los dos tapices del museo se cederán para su exhibición conjunta en el Hospital Tavera de Toledo con los dos tapices que conserva esta Fundación.