Israel justifica el ataque a la flotilla por su finalidad "política" y sus métodos "violentos"

• El viceministro de Exteriores dice que se quería abrir un corredor de armas
• Detalla que había armas en la flotilla que fueron usadas contra el ejército
• El ministro de Defensa dice que los soldados temieron por sus vidas

Israel justifica el ataque a la flotilla

Israel ha defendido su derecho a interceptar el convoy humanitario porque no llevaba en realidad ayuda humanitaria sino que su única intención era política, romper el bloqueo a la Franja de Gaza, donde gobierna Hamás, segun el viceministro de Exteriores, Danny Ayalon.

Ayalon ha dicho que este convoy era una provocación inaceptable para Israel porque era un apoyo para Hamás, que es "una organización terrorista", y ha considerado que no era en realidad humanitario ya que, a su juicio, de ser así habría aceptado la oferta israelí de distribuir ellos la ayuda humanitaria.

Israel cree que dejar pasar a esos barcos habría supuesto la apertura de un corredor para el contrabando de armas y ha acusado a los activistas de usar métodos violentos, justificando la respuesta y el empleo de las armas de los comandos israelíes, que ha dejado al menos 14 muertos.

Para el responsable israelí, la flotilla tenía conexiones con organizaciones terroristas como Hamás y Al Qaeda y ha subrayado que en los barcos se han encontrado armas que fueron usadas contra el ejército israelí.

Mientras, en Turquía ha sido necesaria la acción de la Policía para proteger la embajada de Israel porque centenares de manifestantes se han concentrado allí. Varios políticos palestinos han pedido una reunión de emergencia de la Liga Árabe.

Hay manifestaciones previstas por todos los territorios palestinos y los países limítrofes. En Israel se teme algún tipo de reacción violenta: se ha cerrado la Franja de Gaza, se ha decretado el nivel de alerta tres, el previo al estado de emergencia, y podría desatarse la violencia en Gaza y Cisjordania.

Barak: Los soldados pensaron que sus vidas peligraban

Por su parte,  el ministro israelí de Defensa, Ehud Barak, ha asegurado que los soldados que mataron a una decena de activistas en el asalto a la "Flotilla de la Libertad" abrieron fuego porque sintieron que sus vidas estaban en peligro.

"Lamentamos las víctimas, pero los organizadores de la expedición y sus participantes son plenamente responsables" de lo sucedido, ha declarado en una rueda de prensa televisada desde Tel Aviv, acompañado de la plana mayor del Ejército.

Los militares que participaron en el abordaje, ha explicado, "se vieron obligados a utilizar métodos antidisturbios y armas de fuego al sentir sus vidas en peligro" cuando un tripulante robó a uno la pistola.

Tras la intervención de Barak tha tomado la palabra el jefe del Estado mayor, Gaby Ashkenazi, para defender que "está claro sin ningún tipo de duda que los soldados actuaron como era necesario" y que los medios antidisturbios "no eran suficientes".

El responsable de la Marina, Eliezer Marom, fue más allá al alabar la "contención", la "valentía" y la "determinación" que mostraron durante el incidente los soldados, pertenecientes a un grupo de elite.