Preocupación de la OIEA por la posible dimensión militar del programa nuclear de Irán
- Un informe considera que ha producido al menos 5,7 kilos de uranio enriquecido
- El director general del OIEA asegura que Irán sigue violando las resoluciones
- El organismo considera, sin embargo, que Teherán ha mejorado su cooperación
El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) ha reiterado este lunes su preocupación sobre las posibles dimensiones militares del controvertido programa nuclear de Irán, aunque ha reconocido que Teherán ha mejorado algunos aspectos de su cooperación técnica con la agencia nuclear de la ONU.
En un informe restringido, emitido en Viena, el director general del OIEA, Yukiya Amano, ha asegurado por otra parte que Irán sigue violando todas las resoluciones relevantes del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y de la Junta de Gobernadores del organismo.
El informe del OIEA se produce en medio de las negociaciones en el Consejo de Seguridad de la ONU sobre nuevas sanciones contra la República Islámica
En relación a la polémica decisión de enriquecer uranio hasta el 20 por ciento, Irán ha accedido a permitir un estricto régimen de inspecciones del OIEA, que incluye visitas no anunciadas.
Complejo sistema de inspecciones
Ese paso hacia un enriquecimiento más elevado fue anunciado por Irán en febrero pasado y tiene como objetivo fabricar el material necesario para el combustible nuclear de un reactor científico en Teherán.
En un primer momento, los expertos del OIEA criticaron que Irán no les diera el tiempo suficiente para instalar las medidas de vigilancia en esa planta, situada en Natanaz (centro del país).
Los iraníes han aceptado un complejo sistema de inspecciones, que un diplomático cercano al OIEA ha considerado en Viena como "satisfactorio" para el organismo.
El acuerdo prevé, entre otras medidas, inspecciones sin aviso previo dos veces por mes, así como otras visitas regulares, con lo que los expertos del OIEA podrían inspeccionar esa planta "una vez por semana", destacó la fuente.
Hasta ahora, los iraníes han producido al menos 5,7 kilos de uranio enriquecido hasta el 19,7 por ciento.
Los expertos consideran que al enriquecer uranio hasta esos niveles, los iraníes avanzan en sus conocimientos sobre la forma de controlar el proceso para purificar uranio hasta el 90 por ciento, necesario para fabricar bombas atómicas.
620 kilos más que hace un año
A pesar de ese aparente avance, Amano insta a Irán a ofrecer en otros aspectos la cooperación "necesaria para permitir que el organismo confirme que todos los materiales nucleares en Irán están en actividades pacíficas".
Y es que el OIEA "sigue preocupado por la posible existencia de actividades nucleares no declaradas, en el pasado o en el presente, que involucren organizaciones militares, incluyendo actividades relacionadas con el desarrollo de una carga nuclear para misiles", concluye el informe de 9 páginas, al que tuvo acceso Efe.
Irán ha enriquecido uranio, según el recuento del organismo, un total de 2.427 kilos hasta un nivel inferior al 5 por ciento, unos 620 kilos más que hace medio año.
En un reciente acuerdo entre Irán, Brasil y Turquía, Teherán accedió a trasladar 1.200 kilos de ese uranio al exterior para convertirlo en combustible nuclear para el reactor científico en la capital iraní.
En la propuesta inicial, lanzada en octubre de 2009 por el antecesor de Amano, el egipcio Mohamed el Baradei, esos 1.200 kilos de uranio poco enriquecido (con una pureza inferior al 5 por ciento) constituían el 75 por ciento de la existencias en ese momento.
El número de centrifugadoras de gas para enriquecer uranio se mantiene estable desde hace meses, con actualmente 8.528 equipos instalados y 3.936 de ellos en funcionamiento.
Enriquecimiento de uranio
El enriquecimiento de uranio se encuentra en el centro de la disputa sobre el programa nuclear, ya que ese material tiene aplicaciones tanto civiles como militares.
Estados Unidos y la Unión Europea (UE) temen que bajo el paraguas de un programa civil, Irán esté desarrollando las capacidades para hacerse con materiales fisibles para poder construir una bomba.
Teherán rechaza estas alegaciones y dice que su programa atómico sólo tiene intenciones pacíficas como la generación de energía eléctrica y la lucha contra el cáncer.
El informe del OIEA se produce una semana antes de la próxima reunión de la Junta de Gobernadores del OIEA en Viena y en medio de las negociaciones en el Consejo de Seguridad de la ONU sobre nuevas sanciones contra la República Islámica