Alemania amplia las medidas contra la especulación a los productos derivados
- En mayo prohibió las operaciones a corto sobre la deuda pública
- El Gobierno quiere limitar la volatilidad de los mercados financieros
El Consejo de Ministros alemán ha aprobado un proyecto de ley para ampliar la prohibición de las ventas al descubierto a corto plazo, que ya había impuesto para las acciones de 10 consorcios financieros alemanes y para los títulos de deuda soberana, a todos los derivados de acciones y del euro.
El proyecto presentado a la prensa por el ministro de Finanzas, Wolfgang Schäuble, tiene como propósito hacer más transparente el mercado de ventas de títulos bursátiles a corto plazo para lo cual todos los actores del mercado estarán obligados a informar a la supervisión bancaria de sus ventas.
En cualquier caso, el Ejecutivo alemán ha suavizado su intención inicial de prohibir las ventas al descubierto a corto plazo de todos los valores bursátiles, limitándola a los derivados de acciones, esto es, productos financieros referenciados al valor de las acciones bursátiles, como las opciones sobre acciones -stock options-, y al euro. Además, se abre al posibilidad de que el ejecutivo amplíe por decreto la prohibición para otras operaciones especulativas.
Schäuble ha argumentado la necesidad del proyecto de ley diciendo que el instrumento de las ventas al descubierto se había usado como herramienta para manipular los mercados y había contribuido a profundizar la crisis financiera.
Asimismo, ha justificado la adopción de una solución nacional al problema con el argumento de que la posibilidad de una solución internacional necesita todavía tiempo y que la Comisión sólo podrá presentar una propuesta en octubre. "Creo que lejos de bloquear una solución europea nuestra iniciativa puede impulsarla puesto que ayuda a vencer resistencias a una reglamentación al respecto", ha señalado Schäuble.
Apuestas a la bajas
Las posiciones cortas o ventas al descubierto consisten en que el inversor, en previsión de una caída en el valor de un título, pide prestado ese título a su poseedor -a cambio de una comisión- y después lo vende, para volver a comprarlo cuando caiga el precio; la diferencia es la ganancia del inversor, que presiona de este modo a la baja sobre el valor de esos activos.
A mediados de mayo, la Autoridad Federal de Supervisión Financiera de Alemania (BaFin) decidió prohibir temporalmente las posiciones cortas al descubierto sobre los bonos gubernamentales de la zona euro y sobre las acciones de algunas entidades financieras alemanas -Aareal Bank, Allianz, Commerzbank, Deutsche Bank, Deutsche Borse, Deutsche Potsbank, Generali Deutschland, Hannover Rück, MLP AG y Münchener Rückversicherung-, así como respecto a los seguros de crédito contra impago (CDS).
Esa prohibición se extendía hasta el 31 de marzo de 2011 y la BaFin la justificó en "la extraordinaria volatilidad" experimentada por los valores de deuda emitidos por los países de la zona euro, así como por el "significativo incremento" registrado por los diferenciales de los CDS respecto al riesgo de impago de varios miembros de la eurozona.
“Cuando los apostadores pueden manipular las evoluciones por las que apuestas estamos ante un escándalo“
Ahora, el Gobierno, que considera que las ventas a corto plazo al descubierto fueron uno de los factores que precipitaron la crisis económica y financiera, ha ampliado la prohibición a todos los productos derivados de acciones y del euro -el mercado de divisas de Fráncfort es el más importante de Europa, junto al de Londres-.
"En las bolsas hay apuestas a evoluciones futuras, lo que puede ser legítimo. Pero cuando los apostadores pueden manipular las evoluciones por las que apuestas estamos ante un escándalo", ha concluido Schäuble.