Los clubs de automovilistas instan a los chóferes de políticos a desobecerles para no ser multados

• Piden que no se superen los límites de velocidad por la presión
• El coche de Carod-Rovira fue 'cazado' a 175 km/h y el de Vara a 170 km/h

Las asociaciones de automovilistas Real Automóvil Club de España (RACE) y Automovilistas Europeos Asociados (AEA) han recomendado a los chóferes de altos cargos políticos que se rebelen contra sus jefes y no superen los límites de velocidad reglamentarios en los coches oficiales.

RACE y AEA han lanzado esta petición después de conocerse que el coche oficial del vicepresidente de la Generalitat de Cataluña, Josep Lluís Carod-Rovira, fue "cazado" el pasado mes de noviembre por circular a 175 kilómetros por hora.

Además, la semana pasada se supo que el coche oficial del presidente de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, fue "pillado" a 170 kilómetros por hora.

El presidente de AEA, Mario Arnaldo, ha pedido a los chóferes "que se nieguen a cumplir la orden de alguien que le está presionando para incumplir la normativa". "En materia de seguridad vial no hay excepciones. Todos los vehículos, incluidos los servicios de escolta, tienen que cumplir las normas de tráfico", ha añadido.

Arnaldo ha precisado que, además, el propio conductor es el responsable de cualquier infracción cometida ante el volante, no el político.

Por su parte, el director de Seguridad Vial del RACE, Tomás Santa Cecilia, ha subrayado que "todos los españoles somos iguales ante la ley, no sirven excusas, y los cargos públicos deben servir de ejemplo a la sociedad".

Para Santa Cecilia, resulta "de sentido común" que quienes conducen vehículos oficiales deben cumplir con las normas y "en ningún momento" en sus condiciones laborales deben incluirse "infringir la ley".