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Kan llega al Gobierno de Japón con una "astronómica" deuda pública como gran desafío

  • Ha sido investido nuevo primer ministro por el emperador Akihito
  • La deuda pública supone casi el doble del PIB nipón
  • Kan es partidario de subir los impuestos, intocables desde hace 20 años

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El nuevo primer ministro de Japón, Naoto Kan, conversa con los periodistas durante una rueda de prensa, tras dar a conocer a los miembros de su nuevo gobierno, en Tokio.
El nuevo primer ministro de Japón, Naoto Kan, conversa con los periodistas durante una rueda de prensa, tras dar a conocer a los miembros de su nuevo gobierno, en Tokio.

Naoto Kan ha asumido su cargo de primer ministro de Japón con el compromiso de combatir la astronómica deuda pública nipona, que ha definido como "el mayor desafío" para su Gobierno.

Kan, que fue titular de Finanzas en el Ejecutivo de Yukio Hatoyama -quien anunció su dimisión hace seis días-, fue investido nuevo primer ministro por el emperador Akihito en una ceremonia en el Palacio Imperial.

En rueda de prensa, el nuevo jefe de Gobierno ha identificado la deuda pública, que supone casi el doble del PIB nipón, como el principal problema para el crecimiento nacional.

"Tener unas finanzas débiles significa que no podemos hacer movimientos audaces. Es indispensable sanear nuestras finanzas para el crecimiento económico", ha asegurado, antes de invitar a la oposición a trabajar con el Gobierno para concretar medidas de ajuste.

También ha advertido de que "si seguimos gastando a este ritmo durante los próximos tres o cuatro años,  la deuda será más del 200% del PIB en unos pocos años".

Subida de impuestos

Kan ha asegurado que la razón por la que las finanzas niponas están en el maltrecho estado actual es "que en los últimos 20 años no se han subido los impuestos" y las arcas han recaudado fondos a través de la emisión de bonos, lo que ha disparado la deuda.

Además, a juicio del nuevo primer ministro, los anteriores gobiernos han destinado inversiones a obras públicas "con pocos resultados".

Durante la campaña previa a las elecciones del pasado agosto, en las que obtuvo una victoria aplastante, Yukio Hatoyama se comprometió a mantener el impuesto sobre el consumo en el actual nivel del 5% al menos hasta 2013.

Sin embargo, el nuevo jefe del Ejecutivo defiende subir los impuestos como uno de los modos para sanear las cuentas de la segunda economía mundial.

El nuevo mandatario japonés también ha planteado reforzar el sistema de la seguridad social para que sea "un motor de la economía", al estilo de países nórdicos como Suecia.

A favor de un yen débil

La línea económica de Kan se refleja en la elección del nuevo responsable de Finanzas, Yoshihiko Noda, defensor de subir los impuestos y recortar gastos para afrontar una deuda que a finales del año fiscal que terminó en marzo ascendía a 7,4 billones de euros.

Preguntado por la situación del yen, que en las últimas semanas se ha revalorizado fuertemente respecto al euro, Kan se ha limitado a reconocer que las empresas exportadoras son "la base" de la economía nipona y para ellas "es favorable un yen más débil".

Kan fue nombrado primer ministro después de la dimisión de Hatoyama, presionado por la caída en picado de su popularidad tras su decisión de mantener en Okinawa (sur de Japón) una polémica base militar de EE.UU.

Además de Noda el nuevo Gabinete solo tiene otras cinco caras nuevas, entre ellas la del ministro portavoz, Yoshito Sengoku.

El resto de los nuevos ministros tiene carteras secundarias, mientras Kan ha mantenido a los titulares de los Ministerios más importantes.